El hombre no asistió a la audiencia de separación y envió a sus padres en representación, contó la humorista.

Pamela Leiva convirtió lo que pudo ser una experiencia traumática en casi una anécdota. Y es que tras separarse de su ex marido, el publicista Carlos Segura, luego de meses de matrimonio y tener que seguir pagando las cuotas por varios años más, hoy se ríe del asunto.

De hecho, la humorista recordó el día de su divorcio, donde su exesposo no llegó a la audiencia y envió a sus padres en representación.

“Cuando estábamos en la audiencia el abogado me dice ‘no vino el susodicho, vinieron los papás’. Y yo me paré donde ellos y dije ‘ya, si no vino el hombre, para qué vamos a hacer que estamos enojados’“, contó en el programa online Hazte Ver, de Maly Jorquiera, según consignó Glamorama.

De acuerdo a Pamela, ella suele mantener una excelente relación con la familia de sus ex parejas, de hecho, afirmó que sus amigas la llaman ‘Pamela Leiva, la encantadora de suegras’.

Según relató Leiva, durante audiencia sus exsuegros y ellas se saludaron cariñosamente y hasta se abrazaron. “‘Wena Pamelita’, y abrazados”.

“El año pasado fuimos a un velorio, me pasaron a buscar, me subo al auto, (y le digo) ‘oiga suegro. Disculpe, no sé decirle de otra forma’. (Y él me responde) ‘Usted toda la vida me puede decir suegro’”, aseveró.

Pamela Leiva y su ex esposo: “Me odia”

Eso sí, actualmente las cosas están un poco más tensas con todo lo que ha pasado y cómo su fallido matrimonio fue incluido en sus rutinas, convirtiéndose en un tema de conversación público.

“Obviamente con mis ex suegros no hay una relación fluida. Nos hemos encontrado un par de veces. Hay mucho cariño, mucho amor, pero hoy día es difícil mantener una comunicación más cercana, porque hay muchos temas sensibles y está el hijo de por medio, que me odia”, explicó.

“Yo sé que a él le complica. Le complica la exposición. Le complica todo lo que ha pasado. Pero bueno, ya está”, añadió.

“Una vez yo hablaba con mi ex cuñada y le decía ‘él tiene que asumir con quien se casó. No puede haber hecho todo lo que hizo y no saber que no se las iba a llevar peladas’”, añadió.

“Eso es imposible. Y menos cuando él asumió cuando nos casamos, que iba a salir la foto en el diario. O sea, era evidente que todo esto iba a pasar”, cerró.

La separación de Pamela la condujo a uno de los momentos más duros de su vida. Según contó en su momento, una semana antes de irse del hogar que compartían, él le había dicho que la amaba y que quería tener hijos con ella.

Al poco tiempo se enteró él ya tenía una nueva pareja. “El primer tiempo lloré y lloré, sentía que alguien se había muerto, estuve súper mal pero con un tremendo arnés, con sicólogo, siquiatra, un coach y medicamentos. En algún momento me hicieron hasta una cura de sueño. Tuve dos crisis grandes en esta separación. La primera cuando mi marido se fue de la casa, la segunda, cuando me enteré de cosas muy duras”, contó en Milf.