El actor de 60 años recibirá la condecoración luego de llevar casi 30 años padeciendo la enfermedad y contribuyendo a la investigación de esta para buscar una cura.
El actor Michael J. Fox (Volver al Futuro) recibirá un premio Óscar honorífico por su aporte a la investigación del Parkinson, enfermedad que padece hace poco más de tres décadas.
El intérprete de Marty McFly en la saga estrenada en los 80’s, actualmente tiene 60 años, pero fue cuando recién tenía 30 que se le diagnosticó la enfermedad.
Por “la incansable defensa de la investigación sobre la enfermedad de Parkinson de Michael J. Fox junto con su optimismo ilimitado ejemplifica el impacto de una persona para cambiar el futuro de millones”, es la razón para concederle al estadounidense-canadiense el premio, consignó Europa Press.
En una entrevista con la revista Aarp (una organización estadounidense sin ánimo de lucro independiente, que atiende las necesidades e intereses de las personas mayores de 50 años) hacia finales del año pasado, el actor contó que el médico que lo diagnosticó le dio una esperanza de vida de 10 años, sin embargo, veinte años después de ese plazo Fox continúa trabajando para encontrar la cura del Parkinson.
En el 2000, Michael J. Fox creó su ONG para la investigación de la enfermedad, un año después de haber sido diagnosticado. Aunque desde ahí se mantuvo actuando e interpretando muchas veces papeles relacionados con su afección, en el 2020 decidió retirarse, puesto que: “llegué al punto en que no podía confiar en mi capacidad para hablar en un día determinado, lo que significaba que ya no podía actuar cómodamente”, dijo a la revista en ese entonces.
En la misma entrevista, el actor admitió que ponerse los zapatos y enviar mensajes de voz o utilizar dispositivos tecnológicos eran una dificultad diaria.
¿En qué consiste el Parkinson?
De acuerdo al manual médico MSD, esta enfermedad es “un trastorno degenerativo de progresión lenta que afecta zonas específicas del encéfalo”, es la consecuencia “de un deterioro en la parte del cerebro encargada de coordinar los movimientos“.
Por ello, el primer síntoma de esta enfermedad son los temblores, que afectan a “dos tercios de las personas afectadas” y a la misma vez se pueden manifestar “problemas relacionados con el movimiento o una disminución del sentido del olfato”.
Los temblores suelen manifestarse de manera abrupta e incluso en momentos cuando los músculos están relajados. La rigidez muscular, movimientos lentos, dificultad para mantener el equilibrio y la postura, también son señales tempranas de la enfermedad.
El Parkinson suele afectar a mayores de 50 años, por lo que el diagnóstico del actor a tan temprana edad, 30 años, era una posibilidad ínfima, puesto que solo 1 de cada 250 personas mayores de 40 años padecen la enfermedad.