VER RESUMEN

La vida de Robbie Williams no ha sido sencilla, ya que el consumo de drogas y sus múltiples excesos, casi lo matan en el mejor momento de su carrera musical.

En pleno apogeo, en la década de los 2000, el intérprete de “Rock DJ”, quien venía debutando como solista, luego de la separación de la boy band, Take That, estuvo sumido en una espiral de autodestrucción.

Lo cierto, es que Williams tocó el cielo muy pronto, a los 16 años, desde ahí que el oriundo de Stoke-on-Trent, una ciudad de Reino Unido, despegó para nunca retroceder. El dinero y la fama, que eran parte de su vida, nunca lo llenaron, hasta el momento en que conoció a su actual esposa, la actriz Ayda Field, con quien tiene cuatro hijos en común: Theodora, Charlton, Colette y Beau.

Fue este amor, que lo convirtió en un padre presente, una situación impensada, cuando el mismo Williams no quería tener hijos, porque apenas podía lidiar con sus propios demonios personales. “Pensaba que no iba a tener niños y que no me iba a casar, pero luego conocí a alguien que era increíble y me enamoré por completo. Desde entonces, todos mis pensamientos y sentimientos cambiaron”, afirmó a la BBC.

Tocar el cielo demasiado pronto

El comienzo de la carrera de Robbie Williams, hacía pensar que este joven rebelde, era un hombre seguro de sí mismo, aunque nada más ajeno a la realidad.

Robbie, es hijo de una familia de clase trabajadora, su madre, Janet, administraba pubs, mientras su padre, Pete, era un hombre que soñaba con ser famoso, pese a que regentaba un humilde show de variedades. Así lo describió cuando fue invitado al programa El Hormiguero de España. “Era un cómico y cantante, un showman, una persona carismática de la que te enamorabas en cuanto lo conocías y alguien cuya presencia lo cambiaba todo, convertía la tristeza en felicidad”, acotó.

Es justo este ambiente, que preparó al pequeño Robbie, para tener el suficiente desplante para participar en un casting para ser parte de Take That, una ambiciosa banda integrada por jóvenes ingleses dispuestos a alcanzar la fama.

Take That | Official Charts

Así las cosas, el carácter desinhibido de Williams impresionó a Nigel Martin-Smith, a quien vio en el muchacho un diamante en bruto. Junto a él, estaban Howard Donald, Mark Owen, Jason Orange y Gary Barlow, el líder de facto del grupo, quien era el compositor principal y apuntado por Williams como el responsable de no dejarlo crecer artísticamente mientras eran compañeros.

“Parecía que había una persona en dirigir en Take That y ese era Gary Barlow. Todo giraba en torno a él. Y cuando era joven, había estado celoso de eso. Supongo que mucho de mí estaba resentido con él”, afirmó Williams, en el documental biográfico “Crudo. Honesto.Real”, filmado por Netflix.

En este contexto, un joven Williams, trataba de sobrevivir al paso de la adolescencia a la adultez, una época que reconoce fue bastante turbulenta. Desde entonces, que empezó a beber en exceso “una botella de vodka cada noche antes de ir a ensayar”, contó en la serie documental, y a consumir en exceso cocaína.

Fueron en estos años, en que Williams se transformó en un icono de la música, logrando 60 millones de discos vendidos y obtener la mágica cifra de 14 discos en el número uno del Reino Unido. Pero lograrlo no fue nada de fácil.

La caída libre de Robbie Williams

Después de ser obligado a abandonar Take That, Williams preparó su carrera de solista, esperando tocar las estrellas, pese a que no tenía su futuro asegurado.

En 1995, el año en que sale de la banda, el cantante acumulaba deudas por 400.000 libras (cerca de medio millón de euros), consignó la revista Hola.

Así que era el todo o nada con su álbum debut, Life Thru a Lens, que generó una ola de reacciones, ya que “Angels” incluido en el disco, se transformó en un verdadero himno para matrimonios y funerales, que convirtieron a Williams en un ídolo de masas.

Recordemos que fue su primer trabajo que estuvo en el top 10 de los Billboards durante 28 semanas seguidas, indicó nuestro medio asociado RPP.

Robbie Williams en el festival de Knebworth en 2003 | Amazon Prime Video

En medio de este éxito comercial, la vida privada del intérprete también experimentó un drama, con su entonces pareja, Nicole Appleton, la integrante de la banda All Saints, quien fue obligada a abortar por su compañía discográfica London Records.

De hecho, según reprodujo el Daily Mail, Williams le habría dicho a Appleton que consideraba que su futuro hijo “le estaba salvando la vida”.

Fue este suceso, realizado a cuatro meses de la gestación, que destrozó a Williams, que según trascendidos de la prensa, fue el motivo de la ruptura de la pareja, quien estaba comprometida a finales de los 90.

El cantante agregó sobre el aborto de su expareja que “yo no la obligué a hacer eso, pero fui un novio horrible, realmente horrible, y estaba en el apogeo de mi adicción y alcoholismo”, indicó Daily Mail. “Y me rompe el corazón cada vez que lo veo porque ella es un completo ángel, y todavía siento vergüenza por quién era yo en ese entonces”.

Desde entonces, el cantante lidió con la depresión y varios problemas con el alcohol y las drogas, adicciones que tenía desde que era integrante de Take That.

Hasta que Robbie Williams conoció a Ayda Field

El cantante inglés, de 51 años, ha comentado que recién en los últimos 15 años, ha conocido la auténtica felicidad, tras conocer a su mujer, la actriz Ayda Field.

Aunque con ella, no partió de la mejor forma. Según el cantante, conoció a Ayda por un amigo en común, pero que su primer encuentro tuvo varios malentendidos.

Quedaron en tener una cita en la mansión del artista en Los Ángeles, en el momento más álgido de la adicción de Williams. De acuerdo con el artista británico, en una entrevista a la revista You, en la velada previa, había estado con otra mujer. “Mi dealer se acaba de marchar, yo me había acostado con ella y me había dejado una bolsa de drogas”, confesó.

Por otro lado, el hogar de Robbie, afirmó su actual esposa, no era un lugar cálido ni menos el escenario ideal para formar una familia. “La casa estaba sin una luz, era raro. Nos sentamos a hablar y no teníamos nada en común”, acusó Ayda.

A todo esto, al ver lo poco que congeniaban, Williams decidió llevar a Field a una fiesta, pero en el camino, comenzaron a conectar emocionalmente. “Sentí que el universo se abría”, recordó la actriz.

En ese sentido, Robbie Williams decidió ir a un centro de rehabilitación, mientras la relación estuvo en compas de espera, ya que no estaba bien psicológicamente. “Era un artista que tenía muchos problemas. Era un desastre absoluto. Pero era mi pareja, mi alma gemela”, puntualizó Ayda, sobre el amor que sentía por Robbie.

Una vez recuperado, el artista se mantuvo alejado del escenario, mientras su vida personal, recobraba un nuevo sentido, uno que jamás pensó iba a vivir.

Ambos se casaron en 2010, en una emotiva ceremonia en la mansión de Mulholland Estates, Beverly Hills, que Williams tenía en Los Ángeles.

“Cuando miro hacia atrás después de estar 15 años con Ayda, pienso que ella fue quien lo hizo, que ella me dio una vida. Aquí estoy en la televisión emocionándome. Absolutamente fue ella quien lo hizo”, reflexionó Williams, quien no duda en hablar públicamente sobre lo que significa el amor de Ayda en su vida.