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(Artículo 04 del Código Procesal Penal)
Diana de Gales y el príncipe Carlos se casaron en 1981, y a decir verdad nunca fueron felices, pues él estaba enamorado de Camilla de Cornualles, por lo que no la trató como la “princesa del pueblo” esperaba.
Esto hizo que Diana buscara ser amada realmente fuera de su matrimonio, encontrando a su “verdadero príncipe azul” en su guardaespaldas, Barry Mannakee, aunque nunca se confirmó que tuvieran algo.
“Cuando tenía 24 o 25 años, me enamoré profundamente de alguien que trabajaba en este ambiente. Pero lo echaron y luego él fue asesinado. No me es fácil hablar de esto”, comentó en una entrevista exhibida en un documental de Channel 4.
El desubicado comentario del príncipe Carlos sobre Diana de Gales cuando asistían a fiestas
Ir al artículo“Eventualmente él se tuvo que ir y tres semanas después murió en un accidente de moto. Él fue el (amor) más grande que he tenido. Él era el mejor amigo que tuve”, declaró en la oportunidad.
Y es que cuando los rumores de romance comenzaron a sonar fuertes, él fue transferido a un Escuadrón de Protección Diplomática, con sede en Londres, por lo que no lo vio más.
Según relató el editor en jefe de la revista People, Jess Cagle, en el documental de Netflix dividido en dos partes, The Story of Diana, la madre de Harry y William se sentía a salvo con él, y se enteró de su muerte cuando viajaba en un avión privado al Festival de Cine de Cannes, en 1987, noticia que se la dio el mismísimo príncipe Carlos.
Luego de esta gran pérdida, Lady Di se enamoró de un oficial de Caballería del Ejército del Reino Unido, James Hewitt, quien había empezado a darle clases de equitación en 1986. En esa época comenzaron los rumores de infidelidad de Carlos, justamente con Camilla, y quizá por esa razón Diana se atrevió a mantener una relación extramarital con este jugador de polo.
“Era lo suficientemente feliz como para renunciar a esto”, declaró Diana sobre esta relación en una entrevista a Panorama, que salió en 1995, donde reconoció su infidelidad y dio polémicas declaraciones sobre la realeza.
Jess Cagle, aseguró en el documental de Netflix que “James Hewitt fue muy importante para ella, de no casarse con el príncipe Carlos tal vez hubiese sido su esposo. Ella y Carlos pasaban tanto tiempo separados que Hewitt estaba ahí con sus hijos y ellos le tomaron cariño”. Posteriormente, el miembro del ejército “fue transferido a Alemania, y ese fue el final”, agregó.
Pero este gran amor de Lady Di la traicionó, pues vendió su historia, generándose un libro con su colaboración, llamado Princesa enamorada, que salió a la venta con mucho éxito.
Diana quedó devastada.
Simon Perry, corresponsal extranjero de People, contó en el documental que Diana se sentía asediada por este motivo y con tal de tener alguna reacción los reporteros le hacían preguntas muy polémicas, como -por ejemplo- si ahora se sentía como Camilla.
La mencionada entrevista de Panorama dio bastante que hablar. En ella, el conductor le consultó directamete si su relación con Hewitt era más que una amistad. Ella dijo que sí. Luego, le preguntó si había sido infiel. Su respuesta fue: “Sí, lo amaba, estaba enamorada de él… pero estaba muy decepcionada”.
El vestido de la venganza con el que Diana de Gales se lució tras anuncio de infidelidad de Carlos
Ir al artículoPero no fue la única declaración que dio, pues además dijo: “No creo que Carlos pueda ser jamás rey”. Esto generó mucha molestia en la reina Isabell II, quien sintió que fue personal. Acto seguido, según los miembros de la revista People, le envió una carta a Carlos y a Diana, de la cual estaba separada, pidiéndoles que se divorciaran y pronto. Ella aceptó.
Pese a ser mundialmente conocido y aparecer en varios programas de televisión, hoy no tiene un buen pasar, pues enfrenta problemas económicos.
Tras dejar el ejército, en 1994, invirtió en un centro de aprendizaje de golf y en un bar en Marbella (España), pero ninguno tuvo éxito, según revista Vanidades, que también informó que en 2004 fue detenido por posesión de cocaína.
Más tarde, y lo que le valió cientos de críticas, ofreció por una millonaria cifra (10 millones de dólares) las cartas que le escribió Diana durante el periodo que estuvieron juntos, entre 1886 y 1990, pero nadie pagó por ellas. Hoy las vende en 100 mil dólares (cerca de 70 millones de pesos).
Cabe destacar que cuando se dio a conocer la relación amorosa, varios aseguraron que Hewitt era el verdadero padre de Harry, dado su color de cabello y facciones. No obstante, en una entrevista otorgada en 2002, él declaró que “Harry ya caminaba cuando yo empecé mi relación con Diana. Su pelo rojo es similar al mío y la gente dice que nos parecemos. Pero nunca he fomentado esa opinión y aunque estuve largo tiempo con Diana debo dejar claro de una vez por todas que no soy su padre“.
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