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El Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una caída del 0,2% en diciembre de 2024, reflejando un alivio en los precios, especialmente en alimentos y bebidas. Se espera que esta disminución en la inflación se traduzca en una reducción de la Unidad de Fomento (UF) en cerca de -$76,87, llevando su valor a $38.359,64 para el próximo mes. A pesar de este panorama positivo, se prevé un aumento en las cuentas de electricidad en enero, lo que podría presionar nuevamente la inflación y afectar el valor de la UF. Por otro lado, el Valor Agregado de Distribución (VAD) genera preocupación al mantener una deuda de US$600 millones, lo que podría impactar en un futuro incremento en los costos de energía.
Esta sí se podría considerar como una buena noticia, ya que luego que la inflación de diciembre de 2024 mostrara un retroceso, es de esperar que la Unidad de Fomento (UF) también baje.
Lo anterior significará un alivio -al menos durante este mes- para aquellos que deban pagar algún tipo de deuda o crédito relacionado a la UF.
Primero: según lo señalado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del último mes de 2024 cayó un 0,2%. Así, la variación de los precios quedó en 4,5% a doce meses.
Entre las divisiones con descensos, destacaron los alimentos y bebidas no alcohólicas, junto con equipamiento y mantención del hogar, ambos con -0,9%.
Respecto a los productos, bajó el valor de las papas (-16,6% mensual), vinos (-6,6%), y el pan (-2,6%).
¿Cuánto bajará la UF tras el IPC de diciembre de 2024?
Para el cálculo respectivo, se considerará el valor de la UF consignado en la página web del Banco Central: $38.436,51 a la fecha de redacción de la nota.
Considerando el retroceso del 0,2% en la inflación mensual de diciembre, el cálculo arroja una baja de -$76,87 en la UF durante el próximo mes. Por ello, es de esperar que su valor llegue hasta $38.359,64.
¿Qué es la UF?
La UF representa la reajustabilidad del peso, de acuerdo con la inflación: sus ajustes dependen directamente del IPC.
En palabras simples, esto quiere decir que su valor en pesos se recalcula cada mes en función del IPC.
Su variación incide en la mayoría de los préstamos, sobre todo los que tienen relación con el mercado inmobiliario -arriendos e hipotecarios- ya que están fijados en UF; también en los planes de salud, fondo de cesantía, seguros, costos de la educación, entre otros.
Desde fines de octubre del año pasado, las tasas de interés promedio para los créditos hipotecarios en UF han estado bajo el 4,5%, en un contexto donde desde mediados de 2021 se han encarecido considerablemente. Para el 31 de diciembre, el registro anota un promedio de 4,38%.
A pesar de este mejor panorama inflacionario, es de considerar que aún queda un alza de las cuentas de electricidad, el cual se materializará en enero y que podría dar un impulso al IPC y, con ello, a la UF.
En este contexto, el jefe de economía y estrategia Latam de Zurich, Diego Valda, dijo que “aunque la desaceleración de la inflación al cierre del año brinda un respiro al Banco Central, es importante considerar que aún está pendiente el último ajuste al alza en las tarifas de energía en enero”
“En este contexto, anticipamos un incremento de 0,6%, lo que mantendría la inflación interanual por encima del rango meta”, sostuvo Valda.
Finalmente, y relacionado a las cuentas de luz, está otro factor que también podría generar una alza de los costos de la energía: el Valor Agregado de Distribución (VAD), que tras la congelación de las tarifas generó una deuda por US$600 millones.
