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El Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura, comunicó que el pisco chileno estaría a un paso de ser reconocido como Patrimonio Mundial por la Unesco.

¿La razón? logró ingresar a la lista tentativa nacional del patrimonio cultural ante Unesco, un paso clave en su camino para obtener el reconocimiento como Patrimonio Mundial.

La actividad económica relacionada al pisco genera cerca de 40.000 empleos, tanto directos como indirectos.

Reconocido internacionalmente con más de 400 galardones, el pisco chileno generó más de 5 millones de dólares en exportaciones en 2024 según el gremio productor, apuntando principalmente a los mercados de Estados Unidos, Brasil, Alemania, Canadá, España, Francia y China.

Para celebrar el hito, se realizó una celebración ciudadana en Vicuña, en la que participaron empresarios y productores; junto a los ministros Esteban Valenzuela (Agricultura), el canciller Alberto van Klaveren; y Carolina Arredondo (titular de las Culturas).

Tras la inclusión en la lista tentativa, el proceso ahora considera la elaboración del expediente del bien. Esta consiste en un dossier con las especificaciones culturales y naturales del pasaje cultural relacionado al pisco local.

“Una vez enviado el expediente, Unesco lo remite al Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), para su análisis detallado, ajustes y eventuales visitas técnicas de los expertos”, explicó el Minagri.

Posteriormente, y con base a la recomendación de los organismos asesores, el Comité de Patrimonio Mundial de Unesco evaluará y sancionará su posible inscripción inmediata, con observaciones o eventual rechazo.

El tiempo que transcurre entre la inclusión en la lista tentativa y el reconocimiento final podría tomar entre dos y tres años.

“Súper orgullosos”

Francisco Munizaga, presidente de la Asociación de Productores de Pisco, Pisco Chile, comentó que en el sector se sienten “súper orgullosos” por lo logrado; y valoró la colaboración público-privada en el proceso.

El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, recordó también que “es un hecho muy notable ser el primer país de Sudamérica con un paisaje vitivinícola reconocido mundialmente”.

“Estamos redoblando todo lo que tiene que ver con la sostenibilidad estratégica de esta industria con los gobiernos regionales y municipales, respetando además las tradiciones, en diálogo con los distintos sectores, incorporando también al sector apícola, entre otros”, agregó.

La ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo, apuntó que han sido años de trabajo “entre el sector público y privado que dan cuenta de una política de Estado”.

Y por último, el canciller Alberto van Klaveren señaló que “hoy damos el primer paso en un proceso que requiere trabajo conjunto y compromiso. Nuestro objetivo es presentar el expediente de postulación ante la Unesco a la brevedad posible, para que esta candidatura sea considerada en la próxima reunión del Comité de Patrimonio Mundial el año 2027″.

Además, resaltó que esta incorporación en la lista tentativa “no solo impulsa la industria pisquera chilena, sino que también enaltece nuestra herencia cultural”.