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El conglomerado español Food Delivery Brands pidió su quiebra y cerrará todos sus locales Telepizza y Pizza Hut en Chile debido a un complejo entorno económico y competitivo. Decidieron concentrarse en sus operaciones en Europa, dejando a cerca de 1.400 trabajadores cesantes. La historia de pérdidas en la controladora de Telepizza y Pizza Hut en Chile llevó a esta drástica decisión, sorprendiendo a empleados y sindicatos. La presidenta del sindicato, Carol Duarte, se dirigirá a la Dirección del Trabajo para buscar soluciones ante esta situación.

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El conglomerado español Food Delivery Brands, pidió su quiebra y cerrará todos sus locales Telepizza y Pizza Hut en Chile, “afectado por las consecuencias de un complejo entorno económico, competitivo y financiero”.

A través de un comunicado, la firma explicó que tomaron la decisión de concentrarse en sus operaciones en Europa; y que decidieron “solicitar la liquidación voluntaria de la compañía es el camino más responsable para preservar, en la mayor medida posible, los derechos de los trabajadores y del resto de partes afectadas por este proceso”.

La noticia, de hecho, sorprendió a los trabajadores. Según estimaciones del único sindicato de la cadena de pizzerías, cerca de 1.400 personas quedarán cesantes con el cierre.

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La presidenta de la organización, Carol Duarte, indicó que la jornada de este jueves asistirán a la Dirección del Trabajo para consultar cómo proceder en estos casos. Según señaló, no podrán cobrar el seguro de cesantía hasta que los tribunales resuelvan la liquidación de la compañía.

Historial de pérdidas de controladora de Telepizza y Pizza Hut en Chile

Food Delivery Brands -controladora de Telepizza y Pizza Hut– mantiene operaciones en siete países, incluido Chile, con más de 1.800 establecimientos y empleando a cerca de 20 mil personas. Durante el último año, había comenzado un proceso de desinversión en Ecuador y México, en línea con el plan de reestructuración que habían adoptado sus controladores en España.

En el mercado local, su nivel de participación alcanza el 25% y durante 2022 arribó David Vera a la dirección general de la empresa, con el objetivo de hacer frente a las pérdidas que arrastraban las operaciones, lo que no pudo revertir.