En esta ocasión se contemplan dos vías, una de las cuales incluye la venta de la totalidad de las acciones de la salmonera. En ambos casos, se buscará financiamiento para asegurar las operaciones de la empresa.
El proceso de reorganización judicial de la salmonera Nova Austral avanza a una nueva etapa, gracias a la presentación de la segunda propuesta entregada por la empresa ante el Juzgado de Letras y Garantía de Porvenir.
La nueva proposición tiene en cuenta dos escenarios, uno de los cuales consiste en la venta de la empresa para cumplir con las obligaciones crediticias con los diversos acreedores.
Recordemos que la compañía, principal empleadora de Tierra del Fuego, adeuda más de US$550 millones. Además, unas tres mil personas, directa e indirectamente, dependen de Nova Austral.
Primera línea: condonar créditos
A detalle, la primera opción consiste en una condonación de los créditos de los principales acreedores.
Luego, se buscarán US$23 millones de financiamiento para así continuar con las operaciones de Nova Austral, según explica Diario Financiero.
Los principales acreedores de la salmonera son los bonistas, a quienes se les condonaría el 100% de la deuda, a la vez que se les daría el derecho preferente para participar como inversionistas al momento de buscar financiamiento de capital de trabajo.
Entre estos se encuentra Fratelli Investments, sociedad ligada a los Solari Donaggio. Previamente la administradora de fondos Moneda Asset Management también figuraba en la lista, pero hace poco vendió sus bonos a un fondo inglés, según destacan desde DF.
Otra opción: vender Nova Austral
Ahora bien, en caso de que no se acepte esta primera alternativa, se contempla avanzar con la reprogramación de los créditos de todos los acreedores garantizados que tengan algún derecho de prenda sobre la empresa.
Estos serían pagados en una sola cuota en septiembre de 2024, después de vender Nova Austral.
“Se iniciará un proceso de venta ordenada de la totalidad de acciones, cuyo producto se destinará a prepagar obligatoriamente los créditos de los acreedores garantizados (bonistas), conforme a sus preferencias legales”, señala la propuesta según Diario Financiero.
Con todo, en esta situación también se buscaría financiamiento por cerca de US$20 millones, con tal de asegurar las operaciones en el corto y mediano plazo, además de pagar a acreedores menores, cuyos créditos se reprogramarían, tanto si se cumple el primer o segundo plan.
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