La empresa Cabify rechazó algunos aspectos del proyecto de ley que regula las aplicaciones de transporte de pasajeros, que está en segundo trámite legislativo en el Senado.
Entre ellos, que se establezca un plazo de tres meses para la inscripción de socios conductores, que a estos se les exija licencia profesional y que una persona pueda inscribir hasta dos vehículos como máximo.
En su exposición en la comisión de Transportes de la Cámara, el gerente general de Cabify, Ignacio Gutiérrez, aseguró que de aprobarse la propuesta del Gobierno, en las condiciones actuales, generaría una “caída en la oferta de este tipo de servicios”.
“Es muy difícil que los conductores puedan obtener esa licencia profesional en un corto periodo de tiempo”, señala Gutiérrez.
Críticas que se suman a las de Uber, empresa que advirtió que la cobertura de la plataforma bajaría en un 80%, que unos 70 mil socios conductores dejarían la aplicación y que la tarifa para los usuarios se triplicaría.
El vocero de los taxistas independientes, Claudio Morales, dijo confiar en los senadores que integran la comisión de Transportes, ya que cree que los legisladores “tienen una idea clara de cómo estas empresas lo único que hacen es maquillar un trabajo o modelo que lo único que va a conseguir es la depredación de estos trabajadores”.
El miércoles, la instancia seguirá recibiendo exposiciones de distintos gremios para, en las próximas semanas, comenzar con la votación.