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La discusión por la apertura de las grandes multitiendas en Viernes Santo sigue dejando posturas encontradas, incluso en las filas del Gobierno.

Ya es conocido que Falabella, Paris y Ripley tomaron la decisión de levantar sus cortinas en la mencionada festividad religiosa, lo que ha levantado el rechazo por parte de los trabajadores del retail, mientras que los gremios como la CNC y la CCS se han mostrados abiertos a la iniciativa, señalando que no es un feriado irrenunciable.

Tras esto, un grupo de parlamentarios de Chile Vamos ingresó un proyecto de ley para declarar este día como un feriado irrenunciable

Y si bien la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, mostró un cierto apoyo a la idea de mantener ese día libre para los trabajadores, su par de Hacienda, Mario Marcel, deslizó una postura más crítica a la idea de implementar un nuevo feriado irrenunciable.

La postura de Marcel por declarar Viernes Santo Irrenunciable

Durante el jueves, al ministro Marcel se le consultó por este proyecto de ley, surgido luego de los reclamos por los trabajadores del retail respecto a la apertura en Viernes Santo.

En este sentido, el jefe de Hacienda sostuvo que “todos sabemos que los feriados irrenunciables tienen un costo económico”, agregando que Chile ya posee un número de feriados superior al de otros países.

“Entonces, también cuando hay tanta discusión sobre el crecimiento futuro, seguir agregando feriados o transformándolos en irrenunciables, todos sabemos que tienen un costo para la economía, un costo en empleo, en crecimiento”, argumentó Mario Marcel.

Por su parte, la ministra Jara, si bien dijo anteriormente que esperarán el informe de la Dirección del Trabajo (DT) al respecto, para “hacer el análisis en su mérito” del proyecto, también deslizó -en aquél momento- una crítica a los empresarios del retail: “Pareciera que algunos les importa más el amor al dinero que el amor por sus creencias religiosas”.

Apertura del comercio en Viernes Santo

Las diversas organizaciones de trabajadores de las mencionadas empresas del retail, argumentan que durante más de 20 años, han tenido el Viernes Santo como un día de descanso enmarcado también en la solemnidad del Viernes Santo para el cristianismo.

Con ello, incluso la Iglesia Católica ha salido a pedir reconsiderar la medida, mientras que los sindicatos y la CUT apuntan a lo que se conoce como “derecho adquirido”.

Por parte de las mencionadas tiendas, señalan cambios en los hábitos de consumo de las personas, lo que sumado a nuevos flujos de turistas argentinos, podría haber motivado a trabajar en aquel mencionado día.

A su vez, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), debido al proyecto para declarar la fecha como feriado irrenunciable, advirtió que el calendario de este año posee 19 feriados, ocho de ellos obligatorios, donde en estos últimos las ventas caen aproximadamente “en un 80% frente a un día normal”.

Así, señalan que los ocho feriados irrenunciables dejarían pérdidas de US$1.300 millones para el comercio, “equivale a cerca de 2% de las ventas anuales del sector”.

Y respecto al Viernes Santo, de aprobarse el proyecto, la CCS estima un costo que oscilaría entre US$170 millones y US$120 millones, teniendo en cuenta la “alta afluencia de consumidores” y la llegada estimada de “200 mil turistas argentinos en abril, la mayoría de ellos con intención de hacer compras los días de Semana Santa”.