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La OCDE revisa a la baja sus previsiones de crecimiento económico debido a la guerra comercial desatada por Donald Trump, destacando que los grandes damnificados serán Canadá y sobre todo México. La organización hace un llamamiento para rebajar tensiones comerciales y aranceles, señalando que México sufrirá una contracción del 1,3% en su PIB en 2025. Canadá también se verá afectado con un aumento de la actividad del 0,7%. A nivel mundial, se espera un crecimiento del 3,1% en 2025, con una desaceleración en Estados Unidos, México y Canadá por los aumentos arancelarios. En Europa, la incertidumbre pesará sobre la actividad, mientras que España se desmarcará de la tendencia negativa. China, la mayor economía emergente, verá un descenso en su crecimiento. La OCDE resalta la incertidumbre geopolítica y política actual, advirtiendo que un aumento de aranceles podría llevar a una caída en la producción mundial.
La OCDE ha revisado sus previsiones de crecimiento económico a la baja por el efecto que ya está provocando la guerra comercial desatada por el presidente estadounidense, Donald Trump, y con las medidas arancelarias que ya ha anunciado los grandes damnificados serán Canadá y, sobre todo México, además de los propios Estados Unidos.
En su informe interino de Perspectivas publicado este lunes, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) hace un claro llamamiento al presidente estadounidense -aunque sin nombrarlo directamente- para rebajar las tensiones comerciales y los aranceles que ya ha impuesto y para hacer más previsibles sus políticas por el bien de la economía global.
Sobre la hipótesis de las medidas que Trump ya ha oficializado, México se llevará la peor parte, con una entrada en recesión desde 2025 y una contracción de su producto interior bruto (PIB) del 1,3%, lo que significa 2,5 puntos porcentuales menos de lo que la propia OCDE había anticipado en diciembre.
El año próximo, México será de nuevo el único país del G20 (grupo integrado por los países más desarrollados y los más emergentes) en el que descenderá la actividad, un 0,6%, es decir, 2,2 puntos menos de lo que se calculó hace apenas tres meses.
Canadá también saldrá muy mal parado, con un magro aumento de la actividad del 0,7% tanto en 2025 como en 2026, que resulta de una corrección de las perspectivas de 1,3 puntos en cada ejercicio.
Rebaja para el mundo y para EEUU en 2025
La organización espera que el Producto Interno Bruto (PIB) mundial crezca un 3,1% en 2025, frente al 3,3% de su proyección previa en diciembre.
Estados Unidos debería aumentar su PIB un 2,2% este año, antes de un 1,6% el año que viene, según la OCDE.
La organización internacional rebajó así en 0,2 y 0,5 puntos, respectivamente, sus previsiones de crecimiento de la economía estadounidense en 2025 y 2026.
De acuerdo a la organización, el crecimiento en Estados Unidos, México y Canadá “se desacelerará a medida que entren en vigor los aumentos arancelarios”.
Europa
En Europa, el efecto directo de los aranceles que ya se han oficializado será menor, pero la incertidumbre pesará sobre la actividad, de forma que los autores del informe han disminuido en tres décimas el crecimiento que esperaban en la zona euro tanto para este año (1%), como para el próximo (1,2%), lo que dejaría en raquítica la aceleración desde el 0,7% de 2024.
Mientras Alemania, Italia y Francia verán sus expectativas corregidas a la baja, España será el único de los grandes socios de la eurozona que se desmarcará de esa tendencia y cuyo incremento del PIB duplicará a los de estos tres tanto en 2025 (2,6%) como en 2026 (2,1%).
En cuanto a las grandes economías emergentes, su crecimiento en general se va a ralentizar tanto este año como el próximo y ese movimiento lo simboliza la mayor de todas ellas, China, que pasará del 5% en 2024 al 4,8% en 2025 (una décima más de lo que anticipaba la OCDE en diciembre) y al 4,4% en 2026 (igual que hace tres meses).
La OCDE es consciente de la imprevisibilidad de Trump que ha amenazado con más aranceles a sus diferentes socios comerciales, y en particular a los europeos y, aún sin nombrarlo de forma directa, destaca que “el nivel elevado de incertidumbre geopolítica y política actual hace pesar riesgos importantes para las proyecciones”.
Para ilustrarlo ha hecho una simulación en la que los aranceles bilaterales aumentaran en 10 puntos porcentuales adicionales.
La consecuencia sería una caída de la producción mundial de alrededor del 0,3% respecto al nivel de referencia al cabo de tres años, que sería particularmente fuerte de nuevo para México (-1,3%) pero también muy significativa para Estados Unidos (0,7%) y de menor calado para Japón (en torno al -0,4%), para la zona euro (inferior al -0,2%) y, sobre todo para China (-0,1%), gran rival de Washington.