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Según proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), Chile experimentará un crecimiento económico del 2,5% este año, por debajo del promedio mundial del 3,2%, tendencia que se mantendría hasta 2029, con un crecimiento del PIB chileno del 2,1%, un punto por debajo del crecimiento global del 3,1%. Los bajos índices de productividad y la falta de acuerdos políticos son identificados como las principales razones detrás de este estancamiento, según economistas, quienes destacan la necesidad de aumentar la eficiencia, flexibilizar el mercado laboral y fomentar la inversión para mejorar la situación económica del país. Además, factores externos como conflictos en Medio Oriente y la economía estadounidense podrían impactar la inflación local y sumarse a las dificultades económicas de Chile.

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Pese a que el discurso del presidente Gabriel Boric ha sido “Chile puede más”, refiriéndose a las cifras de crecimiento de nuestro país, las perspectivas de expansión económica para Chile no son optimistas.

Organismos internacionales proyectan que la economía se expandirá hasta 2029 a un ritmo promedio del orden de 2%, lo que significa que nuestro país estará un punto abajo del resto del mundo.

Según las cifras que informó la semana pasada el Fondo Monetario Internacional (FMI), este año Chile crecerá 2,5%, mientras que el mundo lo hará a 3,2%, Una tendencia que se mantendría hasta 2029.

¿Cómo se resume lo anterior? Entre 2015-2029 Chile registrará un crecimiento del PIB de 2,1%, mientras que el del mundo será de 3,1%, Un punto por arriba de nuestro país.

Nuevo vistazo a cifras del FMI sobre crecimiento de Chile

Los economistas afirman que las razones que explican el bajo crecimiento son principalmente dos: una, la baja productividad que tiene el país, que le impide mejorar su capacidad de crecer, y el otro factor predominante es la política y la incapacidad de lograr acuerdos.

Para el Socio Líder de Advisory BDO Chile, Emilio Venegas; la productividad, la eficiencia y las trabas burocráticas son las grandes trabas que hay que enfrentar.

La primera se traduciría en, por ejemplo, “subir los incentivos para capacitación”, mientras que respecto a la eficiencia, “el mercado laboral chileno se ha transformado cada vez más ineficiente, hay que tener políticas laborales flexibles; hay que cuidar a los trabajadores pero también dar flexibilidad al momento de contratar”.

Para la académica Ingeniería Comercial UDLA, Patricia Esparza, recuperar la inversión es clave.

“La inflación de corto plazo se ha visto al alza, lo que ha afectado esencialmente a que el sector inmobiliario no tenga la actividad que se espera, sobre todo porque los créditos se han ido ajustando a la baja de tasas, pero de una forma lenta”, explicó la académica.

Y la mirada en el Congreso es similar. El senador del Partido Social Cristiano, Rojo Edwards, se refirió en general al fast track económico, apoyando únicamente lo relacionado con el proyecto de permisos sectoriales, “que trata de arreglar uno de los principales obstáculos para la inversión y el empleo”.

Sin embargo, el parlamentario señaló que la iniciativa “necesita revisiones profundas”.

Algo que los expertos también recalcan son los escenarios externos.

El conflicto bélico en el Medio Oriente y la economía de Estados Unidos, que presiona la inflación local y que, según los analistas, se sumaría a los incrementos por el alza en las tarifas eléctricas.