En entrevista con la agencia EFE, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, aseguró que los cambios han sido "lentos" y que le hubiera gustado haber aprobado ya los dos proyectos clave del Ejecutivo: la reforma de las pensiones y el pacto fiscal. "En estos dos años surgieron temas que no estaban dentro de la agenda del Gobierno, pero que sí le importan a la ciudadanía, como la seguridad ciudadana", afirmó.
Una vez hechos los ajustes macroeconómicos, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, aseguró en una entrevista con EFE que es el momento de Chile para empezar a crecer y pidió además dejar atrás la “confrontación política” y aprobar su proyecto de pacto fiscal para garantizar “la consolidación de un Estado de bienestar sostenible”.
La semana comenzó con buenas noticias para la economía: el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec), que se considera una estimación anticipada del PIB, creció un 4,5% en febrero.
Además, en contra de lo pronosticado, Chile esquivó la contracción en 2023 y cerró con un crecimiento del 0,2%.
“Chile salió de la crisis con desequilibrios mayores que otros países y tuvo que hacer un ajuste más importante. Pero eso no implicó una recesión, que era la preocupación que se tenía”, indicó Marcel.
Ahora, añadió el expresidente del Banco Central, “nos podemos plantear el desafío de crecer”.
Ministro Marcel en entrevista con agencia EFE
La economía chilena se recuperó más rápido de lo esperado tras la pandemia, con un aumento histórico de 11,7% en 2021, pero en 2022 se comenzó a ralentizar y cerró con un crecimiento del 2,4%.
Las ayudas económicas para paliar el impacto de la crisis, así como los retiros anticipados de los fondos de pensiones, dispararon la inflación hasta un histórico 14,1 % en agosto de 2022.
El Banco Central aplicó un agresivo aumento de tipos y la inflación cerró 2023 en el 3,9%.
Marcel aseguró que el ajuste se hizo a la vez que se implementaban “políticas de apoyo muy dirigidas a los sectores más vulnerables, que permitieron reducir el costo social”.
En la encuesta nacional CASEN del 2022, apuntó el ministro, se mejoró “tanto en materia de pobreza como en materia de distribución en comparación con 2017, pese a todo lo que ocurrió entremedias”.
Para 2024, el Gobierno estima que el PIB se expandirá un 2,5%, pero el ministro no descartó un aumento de las proyecciones.
Cambios lentos
Al frente de Hacienda desde el inicio del Gobierno del presidente Gabriel Boric, en marzo de 2022, Marcel hizo repaso a otros logros económicos alcanzados, como la aprobación del royalty a la gran minería o la política nacional del litio, que busca convertir al Estado en un actor relevante en la industria de este mineral.
El ministro reconoció, sin embargo, que los cambios han sido “lentos” y que le hubiera gustado haber aprobado ya los dos proyectos clave del Ejecutivo: la reforma de las pensiones y el pacto fiscal.
“En estos dos años surgieron temas que no estaban dentro de la agenda del Gobierno, pero que sí le importan a la ciudadanía, como la seguridad ciudadana”, señaló.
Consciente del descontento que siente parte de la ciudadanía y que las encuestas reflejan semanalmente, Marcel indicó que “un gobierno con minoría parlamentaria y en un período de bastante tensión política necesita tiempo y mucho esfuerzo para sacar adelante proyectos de envergadura”.
Consolidación del Estado de bienestar
Hace poco más de un año, la Cámara de Diputados y Diputadas rechazó una ambiciosa reforma tributaria que buscaba recaudar el 3,6% del PIB en cuatro años.
Tras enfrentar un duro golpe legislativo, el Ejecutivo replanteó el denominado “Pacto Fiscal”, rebajó las expectativas de recaudación al 2,7% y dividió la iniciativa en distintos proyectos que ha ido presentando por separado en la Cámara.
Los escollos están principalmente en el levantamiento del secreto bancario y el impuesto a la renta, con el que se pretende recaudar un 0,6% a través de un aumento de las tasas a los más ricos.
Latinoamérica, apuntó el ministro, “está llena de episodios en los que se ha tratado de ser voluntarista, aprobando reformas y beneficios que después no se pueden financiar o que luego obligan a ajustes macroeconómicos muy costosos socialmente”.
“Lo que está en juego es la consolidación de un Estado de bienestar sostenible”, resaltó.
El Gobierno llegó a un acuerdo la semana pasada con la Democracia Cristiana, pero los votos siguen siendo insuficientes y hay muchas reticencias en la derecha, pese a que tanto organismos internacionales como agencias de ‘rating’ coinciden en la necesidad de que Chile reforme su sistema tributario.
“Tenemos un escenario político complejo, con mucha confrontación política y donde el tema fiscal y el tamaño del Estado son importantes para algunos”, zanjó.