Se detectaron ocho localidades de la zona central con mayor potencial. El desarrollo de este “hub” podría, además, generar unos 10 mil puestos de trabajo. Anglo American viene impulsando esta tecnología desde hace algunos años.
Desarrollar un valle del Hidrógeno Verde en la zona central no solo es factible, sino también, puede traer importantes beneficios para las personas y el medio ambiente. Esas fueron algunas de las conclusiones de un estudio impulsado por Anglo American, presentado este martes, cuyo objetivo era analizar la factibilidad de crear este proyecto en la zona central, con énfasis en las regiones Metropolitana y de Valparaíso.
Durante su desarrollo, el estudio fue sociabilizado con más de 60 actores públicos y privados con el fin de detectar potenciales sinergias y obtener retroalimentación, para mejorar los insumos generados. Además, se realizaron encuentros multisectoriales, convocando a representantes de entidades como Corfo, diferentes ministerios, la Comisión Nacional de Evaluación y Productividad, entre otras.
En total, son ocho las zonas con potencial de convertirse en polos de desarrollo de Hidrógeno Verde: Llay Llay, Quintero, Pudahuel, San Antonio, Los Andes, Tiltil, Colina y Paine. Se trata de lugares que podrían complementar tanto producción como demanda de H2V.
Además, se determinó que el desarrollo de este valle de Hidrógeno Verde podría impulsar inversiones por más de US$3.500 millones en la zona central, además de generar 10 mil puestos de trabajo, relacionados tanto con proyectos renovables como con plantas productoras.
Uso del Hidrógeno Verde
En relación con la demanda potencial de Hidrógeno Verde, se estimó que en un horizonte a 2040 los requerimientos de Hidrógeno Verde podrían llegar a 800.000 toneladas anuales, equivalente a todo el H2V que podría requerir la minería de Chile y Perú.
Dicho requerimiento proviene principalmente de camiones de transporte de carga de larga distancia y buses interurbanos, segmentos en que la llamada “energía del futuro” presentaría ventajas comparativas respecto a otras tecnologías como la electromovilidad a base de baterías.
El estudio estimó que la introducción masiva del Hidrógeno Verde en la zona central permitiría desplazar cerca de 3.000 kton de CO2/año, equivalente al retiro de 850.000 automóviles de circulación.
El rol de la minería
El sector minero también podría tener un rol trascendental en la demanda por Hidrógeno Verde, principalmente en los primeros años. Analizando un horizonte de diez años, la minería sería la industria que podría impulsar el desarrollo de este combustible, representando entre un 50% y un 70% de la demanda, liderando este desarrollo y cumpliendo un rol similar al que tuvo en la introducción de las energías renovables en Chile.
El vicepresidente de Asuntos Corporativos y Sustentabilidad de Anglo American, Juan Pablo Schaeffer, destacó que este estudio permite iniciar un camino para avanzar en el despliegue del H2V en la zona central, que es la que concentra el mayor número de habitantes en el país, generando importantes beneficios en materia ambiental.
“El Hidrógeno Verde es importante para alcanzar la descarbonización de Chile, según las metas establecidas por la ley de Cambio Climático a 2050. Por ello, estamos contentos de haber podido impulsar este estudio, cuyos resultados indican que sus beneficios son muy relevantes, principalmente en materia ambiental”, añadió el ejecutivo.
En el estudio también se analizaron las brechas competitivas que tiene el país para masificar esta tecnología, de las cuales dos resultaron ser fundamentales: los costos de energía y los tiempos de tramitación de permisos, que será necesario abordar en el futuro para poder desplegar el potencial del H2V en Chile.
El concepto de valle del Hidrógeno Verde ha sido ampliamente utilizado en el mundo, con el objetivo de introducir esta tecnología a los territorios, generando espacios colaborativos entre industrias, la comunidad y el Estado.
Este estudio se realiza bajo el enfoque de Desarrollo Regional Colaborativo (CRD, por su sigla en inglés) de Anglo American, cuyo objetivo es promover actividades productivas, atrayendo socios institucionales e inversionistas que puedan generar ingresos y empleos más allá de la minería.
La visión del gobierno
En el evento también participó el subsecretario de Minería, Willy Kracht, quien valoró el rol que está cumpliendo la industria en el impulso al Hidrógeno Verde. “Ha sido la industria minera, con los pasos de cada una de las compañías del sector, la que ha permitido el desarrollo más acelerado de las energías renovables no convencionales”, comentó.
“En el caso del Hidrógeno Verde, por tratarse de un desafío importante que requiere del trabajo colaborativo y la coordinación de muchos esfuerzos mancomunados, es valorable que sea una compañía minera la que da un paso decidido hacia el desarrollo de este tipo de proyectos, y al mismo tiempo, nos parece que va en la dirección correcta el hecho que también haga un llamado tan enérgico hacia la colaboración entre distintos actores para avanzar hacia el desarrollo de un hub de Hidrógeno Verde en el país”, indicó.
En tanto, la jefa de la división de Combustibles y Nuevos Energéticos del ministerio de Energía, María José Reveco, remarcó tanto los esfuerzos de colaboración detrás de este tipo de iniciativas, como el rol que podría tener el H2V en materia de independencia energética.
“Es relevante que se empiecen a hacer estas identificaciones, con la colaboración entre distintas industrias, para poder impulsar el desarrollo del Hidrógeno Verde. Esto nos va a permitir no solo avanzar hacia el desarrollo y cumplir con nuestras metas de descarbonización, sino que también el aporte que puede hacer a nuestra seguridad energética e independencia energética”, sostuvo.