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El 16 de septiembre de 2023, una gran avalancha de roca y hielo en un fiordo de Groenlandia desencadenó un tsunami de 200 metros de altura que persistió durante 9 días, siendo el más alto registrado desde 1980. Este fenómeno inusual fue detectado por estaciones de vigilancia sísmica en todo el mundo, siendo inicialmente clasificado como un Objeto Sísmico No Identificado (USO). La caída de un pico montañoso provocó el deslizamiento y tsunami, con un fenómeno de "seiche" moviéndose de lado a lado unas 10,000 veces. Expertos advierten que debido al calentamiento global, estos eventos podrían volverse más comunes, especialmente en regiones polares y montañosas. A pesar de que ningún crucero se encontraba cerca del fiordo Dickson, el impacto de un tsunami de tal magnitud habría sido devastador.

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El 16 de septiembre de 2023, una gran avalancha de roca y hielo en un fiordo de Groenlandia, generó un enorme tsunami de 200 metros de altura que se mantuvo activo por 9 días. El fenómeno apenas se conoció durante esta semana, casi 1 año después.

Ese día, estaciones de vigilancia sísmica de todo el mundo recibieron una extraña señal que permaneció detectable por la cantidad de días mencionados. Como era tan inusual, los expertos la calificaron inicialmente como un Objeto Sísmico No Identificado (USO, por sus siglas en inglés).

Se trató de algo nunca antes visto, pero que podría volverse habitual, advierte el estudio publicado el pasado 12 de septiembre por la revista Science, que confirmó la ocurrencia del gigantesco tsunami.

La avalancha provocó el tsunami más grande desde 1980

El evento sísmico ocurrió tras el desplome de un pico montañoso de 1,2 kilómetros de altura en el fiordo Dickson, al este de Groenlandia.

La caída violenta de roca y hielo se precipitó en el fiordo, lo que desencadenó el tsunami y un fenómeno conocido como “seiche”: una ola que se movía de un lado a otro, aproximadamente unas 10.000 veces, durante los 9 días.

Según los investigadores, este megatsunami de 200 metros de altura es el más alto registrado en el planeta desde 1980. Es el doble de alto que la torre Big Ben en Londres, y mucho mayor que las olas producidas tras el terremoto de Indonesia, en 2004, y en Japón, en 2011.

Efectos del calentamiento global

En las regiones árticas, que son las que están experimentando el calentamiento global acelerado, estos deslizamientos de tierras pueden estar provocados por el adelgazamiento de los glaciares, la degradación del permafrost o la alteración de las precipitaciones, advierte el estudio.

“El cambio climático está remodelando nuestro planeta y nuestros métodos científicos de un modo que apenas estamos empezando a comprender”, afirmaron en una publicación de The Conversation dos de los autores, Stephen Hicks y Kristian Svennevig.

Estos desprendimientos pueden desencadenar tsunamis destructivos de gran magnitud, sobre todo cuando se producen en masas de agua confinadas como los fiordos, plantean los especialistas.

“Es un duro recordatorio de que navegamos por aguas desconocidas. Hace apenas un año, la idea de que un seiche pudiera persistir durante 9 días se habría tachado de absurda”, dicen los expertos. “Sin embargo, estos sucesos antes impensables se están convirtiendo en nuestra nueva realidad“, agregan.

Eventos más habituales

Aunque estos deslizamientos ya se habían registrado en el pasado, esta avalancha con tsunami fue el primero jamás visto en el este de Groenlandia, una zona que parecía inmune a estos catastróficos fenómenos inducidos por el cambio climático.

“Sin duda, no será el último megatsunami de este tipo. Como el permafrost de las laderas empinadas sigue calentándose y los glaciares siguen adelgazando, podemos esperar que estos sucesos ocurran con más frecuencia y a mayor escala en las regiones polares y montañosas del mundo“, plantean los investigadores.

“Mientras seguimos alterando el clima de nuestro planeta, debemos estar preparados para fenómenos inesperados que desafían nuestra comprensión actual y exigen nuevas formas de pensar”, concluyen.

Ningún crucero se encontraba cerca del fiordo Dickson el día del corrimiento de tierras y el tsunami, pero de haber sido así, las consecuencias de una ola de tsunami de esa magnitud podrían haber sido devastadoras.