Este nuevo método que desarrollan científicos de la Universidad de Chile, podría replicarse en todo el planeta.
Investigadores de la Universidad de Chile desarrollaron una nueva metodología para detectar tsunamis a través del modelamiento. El trabajo publicado en la revista Scientific Reports de Nature que permite evaluar de manera más realista la amenaza de estos fenómenos.
“Los resultados de esta investigación plantean un cambio importante en la manera en que se estaba modelando. Tienen, al mismo tiempo, aplicaciones muy directas para la elaboración de cartas y mapas de amenaza de tsunamis”, explicó el investigador del Programa Riesgo Sísmico (PRS) de la Universidad de Chile, Mauricio Fuentes.
Los investigadores proponen recrear en un marco de probabilidades aceptables a las posibles formas en que un tsunami podría producirse e impactar una determinada localidad. Siendo este un modelo replicable en cualquier punto del globo.
“En general, las amenazas de tsunami dependen del carácter probabilístico de las diferentes fuentes de tsunami, tales como terremotos, deslizamientos, volcanes, impacto de asteroides, entre otros”, señala el artículo titulado “Stochastic tsunami modeling induced by kinematic complex sources” (“Modelamiento estocástico de tsunamis inducidos por fuentes cinemáticas complejas”).
“Es bien sabido que la mayoría de los tsunamis han sido generados por grandes terremotos en zonas de subducción. Alrededor del 70 % (1.942 de 2.767) de todos los tsunamis identificados están relacionados con fuentes sísmicas”, señala la publicación.
El nuevo método para detectar tsunamis podría replicarse
La propuesta de metodología se validó con un caso de estudio que fue la trinchera Kuril-Kamchatka (en el Pacífico Noroccidental, al este de las islas Kuriles, la isla japonesa de Hokkaido y la península rusa de Kamchatka).
“Fue interesante utilizar la zona de Kuril-Kamchatka porque es un caso poco estudiado. Suelen ocuparse otras regiones de Chile, Japón o Estados Unidos”, señaló Fuentes.
Chile está localizado en la zona suroriental del cinturón de fuego del Pacífico, la zona más sísmica del mundo, y sufre cientos de pequeños movimientos telúricos a causa de la subducción de la placa de Nazca bajo la placa Sudamericana.
En 1960, la región meridional chilena de Valdivia sufrió el terremoto más potente registrado en los tiempos modernos, de magnitud 9,5 en la escala abierta de Ritcher y causó la muerte a 1.655 personas.