Blanquita se titula el nuevo proyecto cinematográfico del director Fernando Guzzoni (Carne de perro, Jesús): una película centrada en la otrora testigo clave del Caso Spiniak, Gema Bueno, la misma que a inicios del 2000 tuvo en vilo a la clase política tras denunciar una exclusiva red de prostitución infantil que operaba en la capital.
Por estos días, la cinta es promocionada en uno de los eventos fílmicos más importantes del mundo, el Festival de Cine de Venecia, donde el equipo realizador busca financistas para la última etapa de producción.
Giancarlo Nasi, productor de Blanquita, explicó a La Radio los planes de la delegación en Italia, donde se erigen como el único equipo chileno en la selección oficial del certamen.
“Hay que dejar en claro que por ahora la película es un proyecto. Estamos en una etapa muy avanzada, vamos a filmar el próximo año. Somos la única selección chilena que está en Venecia, y estamos seleccionados en un encuentro de mercado en el cual proyectos de alto calibre viene para acá a buscar los últimos socios para filmar la película”, contó Nasi.
En Venecia, el productor ha comprometido apoyo económico de diversos países, incluido el del Ministerio de las Culturas. “Estamos en busca de los últimos socios, principalmente agentes de venta y distribuidores para poder tener lista la película y estrenarla el próximo año o el 2020”, dijo.
“(La película) se inspira libremente en el caso de Gemita. Lo que ha hecho Fernando es crear un personaje fascinante: una niña sin voz, que es excluida de la sociedad, que ha pasado por situación de calle, que toda su vida la sociedad la ha hecho invisible y que un día se arma de valor y decide convertirse en testigo clave de un tremendo caso, y termina poniendo en jaque y acusando a la gente mas poderosa de la sociedad”, agrega el productor.
Tal como sucedió en la vida real, aquí la veracidad del testimonio de la protagonista también trastabillará cuando intente dilucidar si efectivamente fue o no víctima de abusos.
“El publico se va a encontrar con una historia épica, heroica, de una niña que a pesar de no ser nadie decide armarse de valor y cuestionar a la gente mas poderosa. Es una suerte de David y Goliat. Poco nos importa si sea o no sea verdad lo que dice. Lo que nos importa es que ella está alzando la voz y representando a tantos niños en situación de calle que la gente y el sistema en sí los abusa constantemente”, afirma Nasi.