Más de 10.000 de personas se movilizaron este sábado en toda Francia contra las “políticas represivas” contra los migrantes que huyen en masa hacia Europa desde Siria y otras regiones en guerra, en respuesta a un llamado lanzado en las redes sociales.
En la capital, unas 8.500 personas salieron a las calles. “¡Abran las fronteras!”, “¡Derecho de asilo para todos los perseguidos!”, decían varias pancartas, o “¡No en mi nombre”, en rechazo a los gobiernos más reticentes a acoger a los refugiados, comprobó un periodista de la AFP.
Otros enarbolaban el retrato de Aylan Kurdi, el niño sirio de 3 años hallado ahogado en una playa turca, cuya foto conmocionó al mundo.
Los manifestantes, de todas las edades, habían llegado en muchos casos en familia a la Place de la République donde se habían dado cita a través de las redes.
“Estoy harta del miedo de la gente”, afirma Véronique Wattiaux, una mujer de 60 años. “La sociedad es siempre una suma. Yo quiero representar a quienes están a favor de recibir” a los migrantes, agregó.
Un 52% de los franceses, según una encuesta publicada el viernes, se opone a recibir a los migrantes y refugiados que tratan de ingresar en Europa, principalmente por el Mediterráneo y los Balcanes.
La manifestación, convocada bajo el lema “No en mi nombre”, surgió de “una discusión en Facebook de personas que se preguntaban cómo expresarse espontáneamente (…), para decir No a las políticas migratorias represivas que provocan miles de muertes”, dijo a la AFP uno de los promotores de la iniciativa, el escritor y cineasta Raphael Glucksmann, hijo del filósofo André Glucksmann.
La convocatoria recibió el apoyo de varias asociaciones, como SOS Racisme y la Liga Internacional contra el Racismo y el Antisemitismo (LICRA).
Representantes de partidos de izquierda -socialistas, comunistas y ecologistas- también anunciaron su intención de acudir a la marcha.
Varias manifestaciones fueron convocadas también en otras ciudades francesas. En Toulouse unas 600 personas marcharon, en Burdeos, medio millón salió a las calles. Lyon, Nantes y Estrasburgo también se movilizaron.