El asesinato de Cristina Tapia de 58 años y de Matías Poblete, de 10, cumplió un año exacto sin que hasta el momento existan detenidos o responsables del hecho.
Las víctimas fueron ultimadas con ensañamiento dentro del domicilio del pasaje Lachtmann, aproximadamente a las 11 de la mañana. Sus cuerpos los encontró el padre del menor para el cual la mujer trabajaba como asesora del hogar.
Hoy, familiares de Cristina Tapia marcharon por el centro penquista portando lienzos y globos negros, exigiendo el esclarecimiento del caso, cuyo móvil es también un enigma.
Cecilia Tapia, hermana de la mujer asesinada, no soporta saber que hay un criminal libre e impune.
El hijo de Cristina, Yehizon Pérez, apuntó hacia el perfil de él o los asesinos.
Pese al tiempo transcurrido, el abogado Eduardo Vivanco, también familiar de la mujer, valoró el trabajo del fiscal Mario Elgueta y de la PDI que cuenta con un equipo especial a cargo.
Se trata de una investigación de alta complejidad en la que los peritos no hallaron una sola huella en el sitio del suceso, donde hace algunos meses un desconocido cerró el Facebook de la mujer, a ello se suma que la tarde del mismo día del crimen el teléfono móvil de ella recibió un llamado que nadie conoce. Son estos y otros datos más que por ahora no aclaran el misterio.