El Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar es un referente de la música de habla hispana, escenario por el cual han pasado destacados intérpretes y compositores durante sus más de 50 años de existencia.
Si bien en sus comienzos lo más importante del certamen eran las competencias Folklórica e Internacional, con los años éstas han pasado a segundo plano.
En la década de los ’60, a quienes ganaban dichas instancias se les daba la llamada Lira de Oro, un importante reconocimiento que se volvió a reeditar para los 50 años del festival en 2009, como un recuerdo de los primeros tiempos.
Este galardón sólo alcanzó a durar hasta 1969, cuando fue reemplazado por la tradicional Gaviota de Plata con un valor cercano a los 500 dólares cada una (235 mil pesos). Tal vez no lo has notado, pero en la cola del ave hay una pequeña lira, que fue insertada en honor al anterior premio.
La Gaviota de Plata solía estar reservada exclusivamente para los ganadores de las competencias. No obstante, esto cambió en 1974, cuando se le otorgó por primera vez a un artista de la parrilla programática, debido a la presión del público: el humorista “Bigote Arrocet” se la llevó luego de una emotiva interpretación de “Libre”, de Nino Bravo.
Desde entonces, el público no dejó de exigirla en reiteradas ocasiones, volviéndose común que fuera entregada a artistas.
Así, para intentar regular las gaviotas surgió la Antorcha de Plata en 1983. Inspirada en las antorchas de papel que el público encendía, estaba reservada para los cantantes internacionales. La estrategia funcionó por unos años, pero en la década de los ’90 ambos premios volvieron a ser dados sin mucho reparo.
En tanto, en 1999 se creó la Gaviota de Oro como un reconocimiento especial a Juan Gabriel por asistir a cuatro festivales consecutivos. Sin embargo, éste tuvo que retirarse antes de su show, por lo que fue otorgada a Ricardo Arjona en su reemplazo. En las ediciones posteriores fue entregada a otros artistas, pero en la actualidad se encuentra descontinuada.
Como si lo anterior no bastara, en otro fracasado intento por reservar las gaviotas a las competencias Folklórica e Internacional -razón por la cual fueron creadas- surgió la Antorcha de Oro.
El orden en que hoy se entregan los premios a los artistas es: la Antorcha de Plata, luego la de Oro, seguida por la Gaviota de Plata. Si el público continúa pidiendo galardones, se concede una segunda Gaviota de Plata, pero no se da una de oro porque ya no se fabrican.
Son cuatro los invitados que han tenido la extraña oportunidad de llevarse dos Gaviotas de Plata: Ricky Martín (2007), Chayanne (2009), Américo y Ricardo Arjona (ambos el 2010), según MSN.com.
Pese a todos los galardones anteriores, un premio inédito en la historia del festival fue creado el 2012 especialmente para galardonar a Luis Miguel por sus 30 años de carrera, siendo el único artista que lo ha recibido. Se trata de la mítica Gaviota de Platino.
Su base de cromo rodio y sus 85 cristales Swarovski, junto a otras incrustaciones, la transforman en la gaviota más lujosa del mundo, con un valor aproximado de mil dólares (470 mil pesos). Como el año pasado fue la primera vez que se entregó, no se sabe si volverá a darse en el futuro.
No obstante, la experiencia dice que una vez se crea un nuevo premio el “monstruo” vuelve a pedirlo una y otra vez hasta que lo consigue… ¿Crees que pasará eso este 2013?