Una artista estadounidense invitó a Alemania a pedir la inscripción de la atmósfera terrestre en el patrimonio mundial de la Unesco, anunció el viernes la Documenta de Kassel, prestigiosa exposición de arte contemporáneo.
La artista Amy Balkin envió el jueves un documento en este sentido al ministro alemán de Medioambiente, Peter Altmeier, acompañado por una petición en forma de 50.000 tarjetas postales firmadas por visitantes de la Documenta, que abrió al público a principios de junio y que dura hasta el 16 de septiembre.
Amy Balkin presenta en la Documenta su instalación inmaterial “Public Smog”, que incluye un “parque público” de aire puro ficticio y efímero, creado gracias a compras esporádicas de pequeños permisos de emisiones de gases a efecto invernadero. Propone así al público volver a comprar el aire que respira, para denunciar con ironía el “problemático” sistema de derechos de emisión, según la página en internet del proyecto.
Milita a favor de la inscripción de la atmósfera terrestre al patrimonio mundial de la UNESCO desde 2006. Hasta ahora el proyecto choca con el hecho de que los Estados no pueden proponer lugares situados fuera de sus fronteras terrestres o marítimas.
La 13ª edición de la Documento, que se celebra cada 5 años en Kassel, acoge cada año a unos 150 artistas procedentes de 55 países y a un centenar de otros participantes procedentes de diversos horizontes como la literatura, la economía, el militantismo medioambiental o la física cuántica. Cierra sus puertas el 16 de septiembre.