El ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, criticó por primera vez este martes que el proyecto de 40 horas semanales de jornada laboral en realidad establece 35 horas de trabajo efectivas, por subir a una hora el tiempo de colación y considerarlo como parte integrante de la jornada. Según el secretario de Estado, ese aspecto de la iniciativa se determinó recientemente con una indicación, lo que es falso. En realidad, estaba desde un inicio.

Desde hace semanas, el debate del proyecto que rebaja de 45 a 40 horas la jornada laboral semanal, impulsado por la diputada comunista Camila Vallejo, se ha tomado la agenda. Pese al creciente apoyo que ha recibido la idea, el Gobierno la calificó de inconstitucional y propuso para contrarrestar una jornada de 41 horas flexibles.

Pero un aspecto central de la iniciativa aparentemente habría pasado desapercibido para el Gobierno: el proyecto en realidad rebaja a 35 las horas efectivas.

comillas
Me da un poco de risa que no se hayan dado cuenta. Es un proyecto súper acotado, ellos mismos decían que era un proyecto ‘malo’ porque tenía dos o tres artículos
- Camila Vallejo

El desconocimiento del Ejecutivo sobre este tema quedó al descubierto este martes, cuando el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, criticó por primera vez el punto.

“El proyecto de 40 horas hoy día es el de 35. Hace algunas semanas presentaron las mismas autoras del proyecto una nueva indicación que se debe imputar a la jornada todo el tiempo que dure el receso para almorzar. Ya no se va a trabajar de acuerdo a ese proyecto 40 horas, sino que 35 horas, pudiendo llegar incluso a 34”, aseguró Monckeberg.

Que ese aspecto haya sido determinado mediante indicaciones es falso, aunque sí la semana se presentaron para hacer más explícita la idea. El punto, en realidad, fue establecido desde el comienzo, cuando se presentó el proyecto en 2017.

Incluso en la página de la Cámara de Diputados se puede leer que la iniciativa, en sus puntos 1 y 6 sobre sus contenidos, establece que el horario de colación “se considerará parte integrante de la jornada de trabajo”, y que este se incrementará de media hora a una.

Con ello, si una persona trabaja cinco días serán 35 horas efectivas más cinco de almuerzo, y si son seis días lo hará 34 horas más seis. Esta es una diferencia sustancial con la realidad actual, en la que hay 45 horas efectivas, con media hora mínima de colación por día que no se considera parte de ellas.

“Nunca leyeron el proyecto de ley. Desde un inicio el proyecto contenía que dentro de las 40 horas se consideraba también el horario de colación”, criticó la diputada del Frente Amplio y presidenta de la comisión de Trabajo, Gael Yeomans. La parlamentaria además comentó que también se considera como parte de la jornada laboral el tiempo de preparación.

Contexto | Hans Scott | Agencia UNO
Contexto | Hans Scott | Agencia UNO

Camila Vallejo, en tanto, dijo que le daba “un poco de risa que no se hayan dado cuenta”, de acuerdo a Diario UChile.

“Es un proyecto súper acotado, ellos mismos decían que era un proyecto ‘malo’ porque tenía dos o tres artículos”, afirmó.

Tras las declaraciones de Monckeberg, quedan dudas sobre la cantidad de empleos que de acuerdo al Gobierno se van a perder por la iniciativa del PC.

El presidente Sebastián Piñera planteó el domingo que 250 mil puestos de trabajo se verían perjudicados, sin embargo, ahora no queda claro si el cálculo se hizo sobre la base de 35 o 40 horas efectivas.

La comisión de Trabajo de la Cámara fijó para el próximo lunes dos sesiones con el fin de discutir en particular y despachar a la sala el proyecto, con la idea que se vote en esa instancia en septiembre.