Este 2017 el cine y la televisión ha estado dominada por la presencia de payasos tenebrosos y asesinos, los cuales pueden provocar pesadillas a cualquiera. Pero mientras para algunos pueden ser cosas pasajeras que incluso disfrutan, en otros pueden desatar una angustia terrible.
Ese miedo irrefrenable tiene el nombre de Coulrofobia, y suele aparecer principalmente en la infancia, sin embargo, en casos especiales puede perdurar hasta la edad adulta.
Esta fobia puede tener diferentes intensidades, yendo de una simple ansiedad al ver un payaso a incluso provocar taquicardia, falta de aire, temblores y hasta ataques de pánico.
Aunque el origen de este miedo aún no se ha descubierto, y de hecho no ha sido reconocido como una fobia oficial por al Organización Mundial de la Salud, un estudio realizado por la Universidad de Sheffield en Inglaterra concluyó que este pánico surge producto del maquillaje excesivo que usan.
En la investigación se trabajó con un grupo de 250 niños de entre 4 y 16 años, quienes acudían a cierto hospital, el cual cambió su decoración por imágenes de payasos. La mayor parte del grupo desaprobó la nueva ornamentación y aseguró que incluso les daba temor. “Encontramos que los payasos eran universalmente rechazados. Algunos los consideraban bastante aterradores e incomprensibles”, señaló uno de los autores del estudio Penny Curtis.
Y lo cierto es que este maquillaje que crea una máscara feliz, para muchos lo único que hace es esconder las verdaderas emociones y la persona tras el disfraz, tal como lo hace su perpetúa sonrisa.
“Nuestra mente interpreta que las sonrisas en general son positivas; no obstante, no es posible sonreír todo el tiempo, porque de ser así, algo falla. Gracias al comportamiento de las personas podemos interpretarlas, pero si el aspecto de las personas o su comportamiento no varían, se convierten en terroríficas”, señaló Steven Schlozman, de la Facultad de Medicina de Harvard, al diario inglés Telegraph.
Su comportamiento irracional tampoco ayuda a la imagen que crean, pues mientras más absurdo sea, más temor puede provocar en aquellos que sienten un rechazo por ellos. “Los payasos siempre han sido asociados con el peligro y el miedo, porque presionan la lógica al límite. Ellos llevan nuestro entendimiento a los limites de la razón y lo hacen a través de chistes y el ridículo”, señaló Andrew Stott, profesor especialista en la cultura de los payasos.
Todos estos elementos han sido utilizadas por años por los medios de comunicaciones para crear un imaginario social, en el que el payaso es un ser diabólico capaz de sembrar terror en una comunidad, como lo que ocurre con IT.
Pero, a pesar de ser un remake, Pennywise no es el primer payaso aterrador que se conoce. De hecho, la realidad ha superado la ficción ya que a través de la historia se han conocido varios payasos asesinos, partiendo por Jean-Gaspard Deburau, también llamado Pierrot, quien mató a un niño en 1836, golpeándolo con su bastón, hasta el archiconocido John Wayne Gacy, o también llamado “Killer Clown”, un psicópata asesino que violó y mató a 33 adolescentes.
Lamentablemente aún no existe un tratamiento formal contra la Coulrofobia, por eso, lo único que se le recomienda a las personas que padecen este miedo es acudir con un terapeuta para comenzar una psicoterapia que los ayude a entender las cosas desde otro punto de vista.