El juez especial Mario Carroza dictó acusación del excomandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, y ocho exuniformados más por el caso Caravana de la muerte, en calidad de cómplice por 15 homicidios y secuestros en el regimiento Arica, en La Serena, el 16 de octubre de 1973.
El que fue la máxima autoridad castrense desde 2006 a 2012 fue incluido en la investigación como cómplice de la muerte de 15 personas en el marco de la operación Caravana de la muerte, tal y como informó CNN.
El excomandante fue arrestado de manera provisional el pasado mes de julio por su calidad de cómplice. Tras una semana encerrado en el batallón de la Policía militar de Peñalolén, pagó una fianza que le permitió obtener la libertad provisional.
Carroza es el encargado de analizar la vinculación de Cheyre a los homicidios y secuestros que tuvieron lugar en 1973 en el regimiento Arica de La Serena.
Además de Cheyre, entre los acusados se encuentra el excomandante de las instalaciones en las que ocurrió el suceso, Ariosto Lapostol.
Por su parte, el abogado de las familias de las víctimas, Cristián Cruz, celebró la acusación: “A pesar de todo el poder del Ejército y la autoridad civil que apoyaron con fiereza a Juan Emilio Cheyre, deben aceptar esta resolución de los tribunales dentro del marco de un justo y debido proceso”.
Las víctimas habrían sido fusiladas por un grupo liderado por el comandante Sergio Arellano Stark: los cadáveres quedaron en una fosa común del cementerio de esa ciudad para ser identificados quince años despúes, en 1988.