La Corte de Apelaciones de Santiago otorgó la libertad condicional al general retirado Raúl Iturriaga Neumann, uno de los más visibles represores del dictador Augusto Pinochet, condenado a 52 años de presidio por delitos de lesa humanidad como el atentado de Carlos Prats en Argentina en 1974.
Según el tribunal, el otrora militar “cumple con los requisitos para acceder al beneficio”, como tener buena conducta y haber superado la mitad de sus condenas.
Recordemos que con este fallo, el tribunal revirtió una resolución de la Comisión de Libertades Condicionales que le había negado el beneficio a Iturriaga Neumann, un exgeneral de Ejército y uno de los jerarcas de la DINA, la temida policía secreta de Pinochet quien durante su dictadura llevó a cabo atroces violaciones de los derechos fundamentales.
Al respecto, la recién nombrada subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Fries, aseguró estar abierta a discutir una ley para que condenados por delitos de lesa humanidad que estén padeciendo alguna enfermedad terminal, puedan salir de la cárcel.
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No obstante, Fries asegura que hay que distinguir entre reos con enfermedades terminales y reclusos que sólo buscan volver a la calle.
“Todo ser humano tiene derecho a beneficios. El punto está bajo qué circunstancias. Y en este caso se trata de gente que cometió crímenes de lesa humanidad, que son de una naturaleza muy distinta a los delitos comunes. Esto no lo dice Lorena Fries, lo dice toda la literatura en materia de derechos humanos”, aseguró en entrevista con La Tercera.
En ese sentido, agregó que “los temas de adultos mayores y enfermos terminales tienen que ver con la pregunta de, como sociedad, cómo queremos ver este tema a futuro. Y ese es un tema a discutir, efectivamente, qué pasa con las personas de 85, 90 años que están en las cárceles”.
Asimismo, y ante un eventual indulto, la personera de Gobierno no se cerró a esta posibilidad. “Ese es un tema que tiene que debatir el Congreso a través de una propuesta de Ley de Indulto General en casos de DD.HH. Yo creo que en algún minuto hay que dar ese debate”, señaló.
“Lo peor que nos puede pasar a los defensores de derechos humanos es perder la humanidad, parto de esa base, pero creo también que para tener expresiones de humanidad debemos sentirnos respetados también en nuestros derechos”, aseveró.