La Superintendencia de Salud confirmó la transferencia de la cartera de afilados a la Nueva Isapre Masvida, que en menos de una semana comenzará sus operaciones y se hará cargo de los afiliados de la antigua isapre.
Lo anterior, tras la crisis financiera que atravesó y la posterior intervención del Estado a la que fue sometida durante casi dos meses.
De esta forma, a partir del 2 de mayo los afiliados podrán dejar la isapre si así lo desean, teniendo un plazo de dos meses para cotizar, por ejemplo, si existe un mejor plan de salud en el mercado.
El Suerpintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, informó que ya se autorizó el traspaso de afiliados desde la antigua isapre a Nueva Masvida, por lo que los clientes podrán a partir del martes comenzar los trámites con la nueva aseguradora.
En tanto, desde la nueva isapre han planteado su preocupación respecto de lo que pueda ocurrir a partir del próximo martes, ya que a partir de ese día la Superitnendencia levantará la prohibición de desafiliarse que pesó sobre los clientes durante el tiempo que fue intervenida por el Estado.
El fin del denominado “corralito” podría traer consigo pérdidas para la nueva isapre, la que se comprometió a no modificar sus condiciones contractuales con sus afiliados y a no subir sus precios durante este año. Así lo explicó su nuevo gerente general, Luis Atabales.
Por su parte, la ministra del Salud, Carmen Castillo, dijo esperar que esta historia tenga un “final feliz” cuando se concrete el traspaso de afiliados y comience a operar la nueva isapre .
El traspaso de afiliados a la nueva isapre Masvida está en torno a los 230.000 afiliados y más de 500.000 beneficiarios, considerando las cargas.
Desde la nueva adminsitración de la aseguradora estiman que, durante el primer año de funcionamiento, la isapre tendrá hasta 25.000 millones de pérdidas económicas, en parte por la eventual fuga masiva de afiliados que esperan a partir de mayo.