El pasado 6 de abril El Principito cumplió 73 años en el mundo editorial. Desde entonces, el libro de Antoine de Saint-Exupéry se convirtió en un clásico instantáneo, sumando cientos de traducciones y miles de referencias culturales.
No contentos con ello, la vigencia de este título de la literatura universal fue puesta a prueba por la ciencia, que dio con cinco lecciones del libro que podrían ser comprobables.
El sitio web Huffington Post reprodujo las premisas que la ciencia avaló en favor del extraño extraterrestre.
1) Hay que reconciliarse con la creatividad que teníamos de niños: Esto nos remite al inicio del libro, cuando el narrador le muestra a El Principito el dibujo de un elefante dentro de una boa. Todos los adultos veían un sombrero, pero El Principito no.
Con respecto a esto, un estudio de la revista Psychology of Music confirmó la premisa: concluyeron que estudiantes de piano se estresan menos cuando improvisan sobre un escenario. Por su parte, la revista Annals of the New York Academy of Sciences Researchers, dedujo a través de un estudio musical que la creatividad permite entender mejor a los demás.
2) Para estar a gusto con uno mismo, no hay que ser tan serio: En el largo deambular de El Principito, destaca su encuentro con el “hombre de negocios”. Durante el encuentro, este le dice que se siente feliz por poseer todas las estrellas de la galaxia.
En este aspecto, la ciencia afirma la premisa. En 2014, la Universidad de California demostró que las personas que se ríen cultivan buena memoria y registran menos niveles de estrés. Otro estudio de Universidad de Maryland arroja que el sentido del humor puede protegernos de enfermedades cardíacas.
3) Tomarse tiempo para uno mismo es la clave de la felicidad: Otro de los personajes enigmáticos del libro es el hombre que cada minuto debe encender su farol. El hombre no descansa, se desvive por cada minuto que pasa, y de aquello El Principito reflexiona.
Esto la ciencia lo viene aclarando desde hace años: la falta de sueño es perjudicial para la salud. Entre los riesgos que corren, está la diabetes, las enfermedades cardíacas, los infartos cerebrales, cáncer, problemas de memoria, apetito descontrolado, e impresionabilidad, entre otros.
4) Hay que lanzarse a descubrir cosas nuevas: La moraleja del hombre viejo que escribe libros gigantes hace alusión a las personas que nunca se atreven a descubrir lo que está más allá de su territorio. A pesar de que el protagonista cree que este es un explorador, el caballero no es más que un geógrafo que nunca se atrevió a abandonar su planeta.
Lo anterior tiene un antecedente científico: según un estudio publicado en 2013 por la Association for Psychological Science, plantearse retos o metas a corto plazo nos ayuda a envejecer mejor.
5) Es mejor tomar decisiones con el corazón: Esta lección se resume en la célebre cita “Lo esencial es invisible a los ojos”, y encuentra su contexto en el capítulo en que El Principito se encuentra con el zorro, quien lo orienta sobre cómo sentir.
La ciencia reafirma, acaso, la línea más famosa de El Principito. Según un estudio publicado en 2012 en la revista Journal of Organizational Behavior and Human Decision, la intuición puede ser tan eficaz como un enfoque analítico al momento de tomar una decisión, siendo incluso más útil en algunas casos.
