Las relaciones amorosas son una especie de rueda giratoria, que en un abrir y cerrar de ojos pasa de la cúspide a la base y viceversa. Escenario complejo para quienes gustan de los compromisos y que pese a los conflictos dentro del noviazgo, prefieren mantener el amorío buscando así una solución a tales altercados.
Sin embargo, tales conflictos surgen porque tanto hombres como mujeres a diario hacen ver a sus parejas las falencias, comportamiento que sólo provoca que el amor del inicio vaya mermando y se instaure aquella crisis que pone fecha de expiración al romance.
Es por eso que la dinámica sentimental tiene episodios complejos que muchos no logran pasar, y quienes sí lo hacen, sufren de forma permanente pequeñas fisuras sentimentales que con el paso del tiempo y sin los cuidados pertinentes se puede romper bruscamente.
Por esta razón, expertos en el área enfatizan en que a medida que avanzan los años, la tolerancia a solucionar los problemas dentro de la pareja es cada vez menor en cuanto a tiempo. Es decir, hoy los problemas no se extienden ni se esconden como era en el pasado, sino que saltan rápidamente a la palestra y comienzan a hacer ruido en la relación.
Si bien con el patriarcado y la sociedad conservadora existen ciertos moldes donde son ellas las que soportan esquemas de insatisfacción, cada vez se hace más patente que las féminas no se quedan calladas al momento de hacerle ver a su chico las falencias que resaltan en la vida conyugal y la forma en que tales conductas van acabando con el romance.
Y en este contexto de conflictos en el vinculo sentimental, “hay que entender que ésta es una interacción donde ambos aportan a su construcción y a establecer un modo de entenderse y comunicarse, por ende, cuando un vínculo sentimental se acaba no hay elementos diferenciadores que podríamos observar en hombres y mujeres, sino que está más dada por elementos interaccionales que por aspectos individuales”, sostuvo Andrés Córdova, psicólogo experto en terapia de parejas y docente de Universidad San Sebastián.
De acuerdo a lo anterior, detallamos las razones más comunes por las que hombres y mujeres terminan con una relación poniéndole fin a esa unión sentimental.
1- Desconexión y desinterés
Se refiere a la experiencia que pueden vivir uno o los dos miembros de la pareja, donde se experimenta desconexión, falta de interés y una clara disminución del deseo por estar con el otro. Cuando se pierde el deseo de sentir a la pareja como única, es un síntoma de que se ha perdido la pasión y el erotismo dentro de la relación; algo que abarca el plano sexual, la comunicación y la contención.
2- El otro ya no cumple con mis expectativas
Muchos se emparejan pensando que la otra persona cambiará rápidamente y se acomodará a mis expectativas, sin embargo cuando eso no ocurre se vive como un fracaso. Hay que tener en cuenta que el estar en pareja si bien es una posibilidad de crecer, mejorar e incluso introducir cambios a nuestra vida, no necesariamente esas modificaciones en la forma de vivir tienen que ver con cumplir expectativas en uno u otro sentido.
3- Se instala la sensación de que no va a cambiar
Cuando hay problemas que son recurrentes y no se logran resolver, ya sea porque no buscan la ayuda oportuna para introducir cambios o porque las modificaciones que se realizan sólo refuerzan las mismas pautas, se puede percibir desesperanza. Ésta última sólo hace pensar que no hay posibilidad de cambio. Esta sensación de desesperanza puede instalarse de manera profunda hasta desencantar al otro e influir a dar término a la relación, incluso sintiendo que se ama.
4- Terceros irrumpen en la relación
Si nos referimos a problemas con terceros no se alude sólo a una infidelidad, sino que también al hecho de que los amigos, la familia o incluso los compañeros de trabajo son más importantes que la relación de pareja.
Cuando surge este descuido por uno de los dos, tanto hombres como mujeres prefieren terminar porque apareció un tercero que las sedujo más y le dio ese tiempo que la pareja descuidó.
De esa forma tanto hombres como mujeres se logran cautivar por un tercero (a) que logre desarmar su esquema de la relación pasada. Por ende, es vital prestar atención al compromiso y buscar ese justo equilibrio que no rompa con lo establecido.
5- Falta de confianza
Si su pareja les miente o les oculta información, lo más probable que al ser descubiertos, comiencen a dudar DE la mayoría de las cosas que les dice. Y es que una vez que pierdes la confianza en su enamorado, nunca te logras sentir bien a su lado y de forma permanente dudarás de lo que hace o dice.
La confianza no necesariamente se pierde por una infidelidad, puede perderse por mentiras en el plano laboral, económico, sobre su vida pasada o simplemente por cosas triviales que dentro de la relación son importantes y tienen sentido.
6- Surgen proyectos individuales por sobre las iniciativas en conjunto
Uno de los posibles motivos de una ruptura de pareja también puede estar dada porque existe la necesidad de desarrollo personal por sobre el crecimiento en conjunto, situación que repercutirá en un futuro distanciamiento en caso que tales metas personales se materialicen. Este desplazamiento desencadena en que se pierda interés de estar con el otro y ya no sea necesario considerarlo en mis proyectos a futuro.
En el caso de las relaciones a corto plazo, un estudio publicado por el medio de noticias El Clarín el cual fue realizado por científicos de la Universidad de Western Sydney de Australia a 6.500 personas que tras un análisis, entrevistas y sesiones de grupo, determinaron que los errores por parte de los hombres y que gatillan a que ellas terminen una relación son los siguientes:
- La falta de higiene
- Que sea perezoso
“Básicamente, para las parejas de corto plazo, si tienen un cepillo de dientes, ya van por buen camino,” señaló Gregory Webster, profesor asociado de psicología social en la Universidad de la Florida.
Con esto concluyeron que el mal olor y la falta de hábitos de higiene son los principales motivos por los cuales ellas no dudan en decirle a su galán: Next.
Por otro lado, el mismo estudio arrojó que las principales causas por las que ellos deciden romper el vínculo con su chica son las siguientes:
- La falta de sentido del humor en la relación
- Que no haya confianza
- Una mala relación íntima
El dolor de la pérdida
Ante tal escenario resulta inevitable vivir la experiencia de un término como un duelo, llevando a los afectados a transitar por las distintas etapas que ello conlleva, las cuales van desde la negación, la rabia, hasta la aceptación.
Por eso, aceptar la ruptura y el distanciamiento implica recoger los aprendizajes de la relación y sobretodo aprender a convivir con la experiencia de la pérdida a fin de sanar las heridas asociadas y los temores que se instalan al momento de una desilusión. Cuando se logra la aceptación, se puede abrir un camino de apertura a nuevas experiencias y se puede estar preparado para un nuevo romance.
A veces resulta difícil convivir con la pérdida, pues se produce una especie de distanciamiento ambiguo, particularmente cuando hay hijos que mantienen la posibilidad de contacto. La pérdida ambigua es una pérdida ambivalente pues no se termina la relación de pareja del todo, ya que siguen existiendo temas que los vinculan y que hace que sea más difícil sostener el dolor.
Por eso el profesional afirma que ante tal escenario es prudente mantener cierta distancia que logre que la persona sea capaz de aclarar su situación y vivir un duelo tranquilamente. De lo contrario el fantasma del ex se presentará de forma constante y pese al distanciamiento pueden haber recaídas que no logren sanar dichas heridas pasadas.