Chilquinta, la empresa encargada de proveer electricidad a toda la región de Valparaíso, presentó un informe en el que descarta de plano algún accidente eléctrico como detonante del mega incendio que afectó a los cerros de la ciudad puerto, el pasado 12 de abril, que dejó un balance oficial de 15 muertos y más de 2.900 viviendas destruidas.
El documento, presentado a la Fiscalía Local de Valparaíso el pasado 19 de mayo, tuvo como fin colaborar en la investigación que lleva adelante la entidad judicial, y “aportar toda nuestra capacidad técnica destinada al pronto esclarecimiento de lo ocurrido”.
En el texto, al que tuvo acceso La Tercera, se hace hincapié que no hubo fallas eléctricas en el inicio de las llamas, así como tampoco lo fue un supuesto contacto de aves, quienes se habrían posado en los cables, generando una descarga y encendido.
“No es lógica ni científicamente sostenible que estas aves (jotes) -posadas o en contacto con los tendidos o las estructuras-, al hacer puente luego de tener contacto con la red eléctrica (…), caigan al suelo encendidas y provoquen un incendio“, afirma el documento, firmado por el gerente legal de Chilquinta, Manuel Pfaff.
Sobre esta misma hipótesis, se hace mención a especialistas quienes conocen el comportamiento de ese tipo de aves, los que niegan un resultado del especulado por algunas personas.
“(…) un evento o fenómeno de estas características, sólo se explicaría en base a lo que se denomina principio de rareza”, se agrega.
En cuanto a las otras dos opciones, sobre un choque de cables por el viento, o un supuesto corte del tendido eléctrico, Chilquinta afirma que no tienen ningún registro digital que refleje “falla o interrupción alguna de suministro antes del inicio del incendio (…). De haberse producido el contacto entre cables eléctricos, se habría ocasionado un cortocircuito”.
En caso de haber ocurrido lo último, se habría cortado al luz en todo el sector, hecho que no sucedió.
Respecto a un corte de cables, se informa que “no hay registros en nuestros sistemas de protecciones ni tampoco reclamos de clientes”, por lo que la hipótesis “debe necesariamente ser descartada”. A su vez, declaran que actualmente ocupan los mismos conductores de electricidad.
Consultados por La Tercera sobre el mismo informe, la empresa comentó que “sólo podemos descartar categóricamente un accidente eléctrico. Si hubo asados, acciones de terceros o falta de cuidado de otras personas en el lugar, es tarea de la investigación en curso”