El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció el miércoles la autorización del uso de marihuana con fines médicos en su estado, que se convierte así en el 21º de Estados Unidos en flexibilizar la legislación sobre esta droga.
“Estableceremos un programa que permitirá hasta a 20 hospitales a prescribir marihuana para uso médico”, indicó el demócrata Cuomo en su discurso anual sobre la situación del estado en la capital Albany (220 km al norte de Nueva York).
Cuomo precisó que la autorización para el uso médico de cannabis tiene como objetivo ayudar paliar “el dolor y el tratamiento del cáncer y otros enfermedades graves”, y responde a la opinión brindada por investigadores del sector de la salud en Nueva York.
El programa piloto “será monitoreado para evaluar la viabilidad del sistema de marihuana médica”, dijo Cuomo.
Su anuncio se inscribe en un marco de creciente flexibilización de la legislación sobre la marihuana en Estados Unidos.
Con Nueva York son 21 de los 50 estados del país y la capital Washington los que permiten, con diversos grados, el uso de esta droga con fines médicos.
El primer estado en autorizarlo fue California en 1996.
Colorado (oeste) fue aún más lejos y desde el pasado 1 de enero permite el consumo recreativo de cannabis para los consumidores mayores de 21 años.
El estado de Washington (noroeste) votó una medida similar que entrará en vigor en la primavera boreal.