La falta de recursos complica la realización de nuevos monitoreos en ríos y lagos de la región sobre Didymo, un alga que está está presente en la zona. Expertos del centro de investigación EULA no descartan que esta invasiva microalga pueda encontrarse en otros lugares del Bío Bío.
La emergencia por plaga de Didymo en la región fue declarada por Sernapesca tras la llegada de esta microalga de color café claro y de aspecto viscoso al río Bío Bío, específicamente aguas abajo de la central Ralco y en las cercanías de la central Pangue. La alerta en esta zona estará vigente, al menos, hasta fin de mes.
Los profesionales del Centro de Investigación EULA de la Universidad de Concepción tienen desde el 2011 un convenio de colaboración con Sernapesca y están trabajando en el tema.
La bióloga, Silvia Basualto, comentó que por ahora no existe forma de erradicar al denominado “moco de roca”, por eso las labores se deben centrar en la contención.
Además no descartó que la invasiva alga esté presente en otros sectores, por lo que es necesario realizar monitoreos en otros lugares, advirtiendo que faltan recursos económicos para ello.
El alga tiene alta tolerancia a diferentes tipos de temperatura, crece rápidamente y actúa como una plaga cubriendo extensas zonas de ríos y lagos, perjudicando por ejemplo el turismo y las actividades de pesca. Además causa un impacto en los ecosistemas acuáticos.
Limpiar con cloro los implementos que se sumerjan en el río contaminado es una de las medidas que se deben adoptar para evitar la propagación del Didymo. La bióloga del EULA señaló que los ríos donde se realizan actividades turísticas y se practica la pesca deportiva son algunos de los lugares que se deben monitorear.