La cafeína es la bebida más ingerida diariamente a nivel mundial. Puede encontrarse en casi cualquier rincón del mundo, y se asocia a la energía, la conversación y un momento agradable.
Pero así como su popularidad crece, también lo hacen sus detractores, quienes mencionan los serios inconvenientes que puede acarrear a la salud.
A continuación te mostramos los 7 mitos más comunes respecto del café, como informa Yahoo.com
1) La cafeína es adictiva
REALIDAD: La cafeína es un estimulante del sistema nervioso central y su uso regular pueda causar un dependencia física de nivel medio; pero no afecta la salud como lo harían otras drogas adictivas. Es por ello que un gran número de expertos no considera la dependencia de la cafeína como una adicción.
Pese a ello, si uno está habituado a consumirla, no es recomendable dejarla de inmediato sino ir poco a poco, para evitar efectos secundarios que pueden incluir jaquecas, irritabilidad o ansiedad.
2) La cafeína provoca insomnio
REALIDAD (dependiendo de cada persona): El cuerpo humano absorbe rápidamente la cafeína pero se deshace de ella con la misma rapidez. En promedio, toma de 4 a 5 horas eliminar la mitad de lo ingerido, y luego de otras 5 horas el 75% desaparece, por lo cual una taza matutina no debería afectar el sueño para nada.
Ahora, si uno toma un taza luego de las 15:00 horas sí podrían existir problemas de sueño, tardando un poco más en que se produzca una sensación de cansancio en el organismo. Todo es variable dependiendo del metabolismo y de la cantidad de cafeína que se ingiere normalmente.
3) La cafeína incrementa riesgos de osteoporosis, enfermedades cardíacas y cáncer
MITO (si se toma con moderación): Cantidades moderadas de cafeína, alrededor de 300 miligramos (casi 3 tazas), no causan daño alguno en la mayoría de los adultos saludables. Sin embargo, esto podría cambiar en aquellas personas más sensibles como gente mayor y aquellas con problemas de presión arterial donde sí puede causar algunas alteraciones.
El consejo que prima es que, ante cualquier inconveniente que se sufra o si el historial médico personal o familiar cuenta con antecedentes de enfermedades, se recomienda consultar un especialista.
4) Las mujeres embarazadas o aquellas que desean estarlo deberían evitar la cafeína
MITO (bebiendo con moderación): Un estudio publicado por la Universidad del estado de Nueva York y por el semanario Epidemiology, observó los efectos de las bebidas que contienen cafeína en relación con los factores que involucran la reproducción y los resultados demostraron que su consumo moderado resulta seguro.
Aún así, como siempre es mejor prevenir, se recomienda siempre un consumo moderado (200 mg, cerca de 2 tazas) como máximo al día.
5) La cafeína es dañina para los niños
MITO: El seminario de pediatría publicó que un estudio realizado en los EEUU en niños entre 5 a 7 años, mostró que ingerían aproximadamente 52 mg de cafeína diariamente y aquellos entre 8 y 12 años, 109 mg por día.
Siguiendo esta misma línea, otro estudio realizado por la clínica pediátrica A. Levinton sugiere que la cafeína consumida en distintos productos con moderación no tiene efectos detectables sobre la hiperactividad de los menores.
Aún así, el mayor problema son el medio por el cual se ingiere la cafeína (como las bebidas), las que sí son pocos saludables para los niños.
6) La cafeína puede disminuir los efectos del alcohol
MITO: Un estudio realizado demostró que el café actúa como un efecto placebo, haciendo que el consumidor piense que en verdad lo esta ayudando a mantenerse sobrio.
La gente que bebe una taza de café piensa que se siente mejor, cuando en realidad su velocidad de reacción y juicio aún siguen muy disminuidas.
7) La cafeína no tiene efectos beneficiosos para la salud
MITO: La cafeína mejora la alerta, concentración, energía y claridad mental. Un estudio en las Escuela de Medicina John Hopkins de Baltimore y Harvard apoyan estás afirmaciones y han mostrado que también mejora la memoria y el razonamiento lógico.
Aporta también una gran cantidad de antioxidantes al organismo, que promueven la salud del corazón y la prevención de algunos tipos de cáncer.