En conversación con La Radio, el Vicepresidente ejecutivo de HidroAysén, Daniel Fernández, se refirió a la votación que favoreció a su empresa, dándole el visto bueno para llevar a cabo el polémico proyecto hidroeléctrico.
Fernández no se mostró sorprendido ante la votación realizada en la jornada de ayer, calificándola como “previsible”, atribuyendo el resultado a los estudios técnicos y descartando un móvil político.
Además se refirió al tendido eléctrico que implicará la construcción de la central, señalando que tienen un pre diseño y que aún deben hacer la ingeniería básica en paralelo al estudio de impacto ambiental, que debería ser entregado en diciembre de este año, para luego dar paso a una etapa de “participación ciudadana”.
Fernández agregó que este es el proceso más trasparente registrado en Chile, ya que ellos cumplen con la legislación ambiental y los elementos técnicos que se les exigen.
Finalmente se mostró confiado ante las acciones judiciales que se puedan emprender, ya que “están acostumbrados a practicas obstruccionistas” y además ya se han desestimado todas las presentaciones que se han hecho contra ellos en tribunales.
Recordemos que la iniciativa -de 3.200 millones de dólares- contempla la construcción de embalses sobre dos ríos de aguas cristalinas, el Pascua y el Baker, inundando unas 5.900 hectáreas -gran parte de ellas vírgenes- para generar unos 2.750 megavatios (MW). La capacidad actual instalada en todo el país es de 14.000 MW.
El proyecto ha movilizado una fuerte ofensiva ambientalista, enfrentando a defensores de la Patagonia con quienes sostienen que es vital para las necesidades energéticas de Chile, que según las proyecciones oficiales debe aumentar en casi un 80% su generación de energía a 2025.
Agrupados en la organización Patagonia sin Represas, los ecologistas, políticos y Organizaciones de distinta índole se han manifestado a nivel nacional y han criticado la destrucción de la Patagonia chilena, acusando a la empresa de crear una campaña de miedo sobre la idea de que el país se quedará sin energía si no se construye HidroAysén.