El arquero titular de Unión San Felipe, Jaime Bravo, se salvó de ser detenido tras agredir al pasapelotas Leonardo Espinoza en el marco del partido que su escuadra perdió por 0-1 ante Santiago Morning, por la cuarta fecha del Torneo de Apertura.
El ex portero de Unión Española y Ñublense, entre otros, golpeó al joven por demorar en demasía la entrega de balones, cuando su escuadra buscaba desesperadamente el empate en el Estadio “Roberto Bravo Santibáñez” de Melipilla.
Posteriormente el meta fue retenido en camarines hasta que Espinoza constató lesiones y se reuniera con oficiales de Carabineros, quienes se hicieron presentes para tomar declaraciones por la Ley de Violencia en los Estadios.
En definitiva, Bravo quedó en libertad porque el joven desistió de la denuncia, amén de las disculpas ofrecidas por el jugador.
San Felipe está en la décima posición con seis puntos, a tres del líder exclusivo Universidad de Chile y visitará a La Serena el sábado en el Estadio La Portada, en partido válido por la quinta fecha del Torneo de Apertura.