El uso del preservativo es el método anticonceptivo más popular y la “barrera” más efectiva contra las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS).
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), su efectividad se aproxima al 98%. Eso sí, si este se usa de la manera correcta, según consignó el portal El Mundo.
Al momento de usar un condón pueden presentarse varios errores que pueden elevar el margen de fallo de un 2% a un 18%. Y uno de los más comunes tiene relación a dónde se guarda el preservativo.
Ni en la billetera ni en el pantalón
Guardar preservativos en la billetera es prácticamente un cliché. Otros, cuando saben que lo ocuparán pronto, lo llevar en el bolsillo del pantalón, pero estos errores pueden ser bastante graves.
Francisca Molero, sexóloga y presidenta de la Federación Española de Sexología detalló a El País que esta falta tiene relación con los roces y la temperatura, lo cual deteriora el material del condón.
“Se puede ir desgastando con los movimientos. Te sientas y lo aplastas, caminas y va rozando”, explicó Molero.
Ana Sierra, también sexóloga coincide con Molero y detalló en El Mundo que también se suele guardar en medio de otras cosas que pueden dañarlo. Por ejemplo, en el fondo de una cartera o bolso, si hay llaves u otro artículo similar podría pinchar el preservativo sin que te des cuenta.
En tanto, Miren Larrazabal, psicóloga y especialista en Sexología, advirtió que debido a que muchos guardan un preservativo en la billetera, al momento de ocuparlo cometen otro error: no revisar la fecha de caducidad.
“Es habitual meterlos ahí y olvidarse de cuánto llevan (…) Esto no es una cuestión de consumo preferente o ‘mejor antes de’. Pasada esa fecha, el preservativo pierde las características de seguridad y fiabilidad. No se deben usar caducados”, sentenció.
El lugar ideal
Molero señaló que el lugar ideal para guardar los preservativos en un sitio fresco, como un velador o en el cajón del clóset de un dormitorio.
Pero en el caso que debamos llevarlo con nosotros por un periodo corto de tiempo, la sexóloga entregó unas ideas.
“En el caso de los hombres, el bolsillo de la camisa para evitar los roces; en el de las mujeres, en el típico bolsillo con cremallera que hay en casi todos los bolsos. Que no vaya suelto y se pueda rozar con otras cosas como las llaves”, concluyó.