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Para muchas mujeres, hablar de orgasmos puede ser un tema tabú. Sin embargo, hay quienes reconocen nunca haber sentido uno.
Cabe señalar que el orgasmo es considerado como la cúspide de la excitación sexual. “Es un sentimiento y sensación poderosa de placer físico que incluye una descarga de tensión erótica acumulada“, especifica el sitio especiliazado Medical News Today.
Asimismo, los especialistas destacan que tienen múltiples beneficios para la salud, debido a las hormonas y otros químicos que el cuerpo libera durante ese proceso.
En este contexto, la psicóloga y sexóloga Ana Lombardía, reveló al sitio Cosmopolitan, un par de tips para reconocerlo.
Como primer consejo, la especialista plantea que debes eliminar de tu mente esa imagen idealizada del orgasmo femenino, que muchas veces se muestra en series o películas. Asimismo, explica que cada cuerpo puede percibirlo de diferentes maneras.
“El orgasmo es un pequeño placer más alto que el resto, dentro de la excitación sexual. Es una sensación muy subjetiva y suele terminar con una percepción de satisfacción muy agradable”, precisa la sexóloga.
Por otra parte, destaca que es importante no intentar experimentar lo que cuentan otras personas. “No son fuegos artificiales, ni se oye música, ni tiene por qué ser la mejor emoción del mundo. Es más, hay personas que sí sienten orgasmos, pero los tienen tan idealizados que no los identifican como tal“, plantea.
Técnicamente, un orgasmo es la liberación de sangre acumulada en los canales sanguíneos de los genitales, que comienza a sentirse por dentro, lenta y progresivamente, “como pequeñas contracciones que van in crescendo”, explicó Silvina Valente, Ginecóloga y Obstetra, al medio La Nación.
Además, añadió que una clara señal, es el alivio, relajación y cierta disminución del deseo sexual, tras haberlo experimentado. “A muchas nos da ganas de dormir, o de quedarnos tiradas mirando el techo”, apuntó.
Cristina Callao, psicóloga y sexóloga, explicó al medio español El País, que los orgasmos suelen extenderse más de 30 segundos y en ocasiones alcanzar hasta un minuto.
“En ese tiempo, aumenta la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Como consecuencia de esto, se produce una hiperventilación (exceso de oxígeno en sangre) y tiene lugar una pequeñísima isquemia (falta de riego sanguíneo al cerebro) para dar paso a una sensación de bienestar general y satisfacción física y mental”, detalla Callao.
Según Lombardía, si no has experimentado un orgasmo, debes descartar que se trate de un problema fisiológico. En este aspecto, resalta la posibilidad de “tener el suelo pélvico en baja tonicidad”, lo que podría estar provocando que las contracciones orgásmicas sean tan leves que no las puedas percibir.
“Una vez descartada la causa física, la mayor parte de los casos en los que no se sienten los orgasmos, están relacionados con factores emocionales y psicológicos“, afirma la sexóloga.
En este caso, lo más recomendable es acudir a un especialista. De acuerdo a sus conocimientos, frecuentemente el conflicto reside en que algunas mujeres son incapaces de deshinibirse, a causa de la falta de confianza en ellas mismas o en su pareja.
No obstante, advirtió que “cuanto más los busquemos, menos aparecerán”. “Así que recuerda que solo hacen falta dos cosas: mucha excitación y desinhibición“, apuntó finalmente.
