Entre ritos, regalos, afectos y gestos de amor, este 14 de febrero puede ser un buen contrapunto para tomar conciencia sobre las señales o “banderas rojas” de una relación tóxica con tu pareja.

Desde el portal Psychology Today, el doctor en psicologíaJeffrey Bernstein se abocó a identificar tres advertencias que dan cuenta de un vínculo perjudicial para ambas partes. “Las relaciones tóxicas tienen un impacto negativo en la salud emocional”, señala el especialista, quien asegura que “ser consciente y hacer un inventario de los problemas significativos en tu relación es crucial”.

1. Comportamiento pasivo-agresivo

“Un ejemplo de comportamiento pasivo-agresivo es si puedes sentir que algo está mal, pero cuando preguntas: “¿qué está pasando?” la otra persona dice: “estoy bien”, o “nada”, pero luego te castiga dándote el tratamiento de silencio. Un gran problema que resulta de su pareja pasivo-agresiva es que los conflictos no se pueden identificar, discutir y manejar”, señala Bernstein.

“El comportamiento pasivo-agresivo de las parejas a menudo va acompañado de ‘gaslighting’, lo que significa tratar de hacerte creer que estás loco. Si con frecuencia sientes que hay algo raro, pero cuando intentas hablar con tu pareja al respecto, se cierra, es posible que tengas una relación tóxica”, añade.

“Otra forma de comportamiento pasivo-agresivo es el tratamiento silencioso. ¿Te priva de afecto físico pero luego se queja de que eres demasiado necesitado? ¿Sientes que cada vez que intentas despejar el aire, desaparece en él? ¿Se niega a ir a terapia? La evitación es una forma muy pasivo-agresiva de toxicidad de relación y a menudo empeora progresivamente con el tiempo”.

2. Crítica y desprecio

En este punto, el psicólogo cita al doctor John Gottman, quien advierte: “La crítica y el desprecio son altamente destructivos en las relaciones amorosas”.

“Las señales de crítica y desprecio pueden aparecer cuando tu pareja se burla de ti de forma desagradable. Una clienta mía le decía a su marido que era sexualmente inadecuado en respuesta a que criticara sus hábitos de gasto excesivos. ¡Un desastre tóxico, seguro!”, destaca.

“El desprecio también puede aparecer como alguien criticando a su pareja en público. Actuar superior también transmite un mensaje despectivo y tóxico. Experimentar a la persona que amas, o que alguna vez amaste, desgarrándote con incesantes descargas de búsqueda de fallas es altamente desmoralizante y emocionalmente poco saludable”, acota.

3. Te sientes irremediablemente perdido en la energía negativa

“En las relaciones saludables, ambos miembros de la pareja se sienten normales y relajados la mayor parte del tiempo. En las tóxicas, los “períodos buenos” que eran tan comunes al principio comienzan a ser menos y más intermedios, y rara vez duran mucho tiempo”, aclara Bernstein.

“Si constantemente te sientes agotado y drenado en tu relación, es hora de pensar en dejarla. Cuando estás en una relación cargada de problemas, es probable que te sientas arrasado, golpeado, emocionalmente en bancarrota y adormecido. Aún más perturbador, las veces que conectas positivamente con tu pareja íntima terminan siendo en vano, porque las vibraciones positivas se tragan por la energía negativa. ¿Parece, por desgracia, que cualquier cambio positivo inicialmente prometedor es insostenible?”, concluye.

¿Qué hacer ante estas señales de relación tóxica?

Al final del artículo, en el apartado “Sé honesto contigo mismo”, el psicólogo se dirige a quienes han detectado estas “banderas rojas” en su presente amoroso.

“Si tu relación es verdaderamente tóxica, y tu pareja no trabajará contigo para hacer cambios, entonces puede ser el momento de irse. Reconocer, y continuar reconociendo, las señales persistentes de una relación tóxica puede empoderarte para salir de ella”, señala.