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Pese a que existe la confianza, a menudo puede resultar difícil hablar de sexo con la pareja, sobre todo si el objetivo es discutir aspectos como la calidad y la frecuencia.
Según detalló la psicóloga Pilar Cristóbal a El País, “generalmente no hablamos de sexo y cuando lo hacemos es de forma impersonal, como si con nosotros no fuese la cosa”.
Esta práctica de evasión puede provocar una mala comunicación con tu pareja y generar frustración y distanciamiento. Si no expresas tus necesidades, difícilmente la otra persona te entenderá.
La terapeuta sexual Laurie J. Watson señaló en una columna de la revista Psychology Today que en una relación de pareja cada parte “trae un historial, expectativas y planes distintos para la intimidad física”, por lo que no es extraño que existan diferencias.
En este contexto, la profesional entregó cuatro consejos para tener una conversación sexual productiva con tu pareja y, de esta forma, lograr resolver las inquietudes y necesidades.
1. En un lugar adecuado y sin sorpresas
Watson recomendó que sea un lugar neutral y nunca el dormitorio. También aconsejó no sorprender a la pareja con el tema de discusión, sino que comunicarle con anticipación de lo que quieres conversar.
“Invita a tu pareja por un café o a tomar algo, y avísale antes de tiempo sobre lo que planeas hablar. Puedes decir, ‘me encantaría hablar de la manera en la que podemos aumentar nuestra frecuencia sexual cómodamente para ambos ¿Podemos ir por un café el próximo sábado en la mañana y hablar al respecto?"”, detalló.
2. Aborda un solo tema por conversación
“Aunque puede parecer eficiente intentar poner sobre la mesa todos los asuntos del dormitorio de una sola vez, las discusiones sobre sexo deben ser cortas, enfocadas y limitadas. Es mejor resolver sentimientos complejos sobre asuntos de la relación de poco en poco”, explicó la profesional.
Si se tienen varios puntos de discusión, lo mejor será dividirlos y enfocarse en uno solo. Por ejemplo, en una conversación solamente abordar la frecuencia y a la siguiente la atracción.
3. Sugerencias en lugar de quejas
Para Watson es fundamental que primero se destaquen los aspectos positivos de la vida sexual. Las quejas difícilmente son bien recibidas, por eso es importante reemplazarlas por sugerencias. Además, también recomendó dar espacio a la otra persona para que exprese su punto de vista.
En este punto coincide Pilar Cristóbal. “Por cada cosa negativa, decir antes dos positivas y, siempre que se critique una conducta, proponer una solución alternativa. Nunca hay que hablar de sexo para criticar, ni antes, ni durante, ni después del acto”, afirmó.
4. Recuerda los fundamentos
Por último, de acuerdo a Laurie J. Watson, existen preguntas básicas que nos pueden ayudar a guiar la conversación y que la pareja puede responder, entiendo de mejor manera lo que el otro espera.
“¿Cuál es la hora del día en la que te sientes más sexual?”; “¿Te gusta que el acercamiento sexual comience con palabras o con contacto?”; “¿Con qué frecuencia te gusta tener contacto sexual a la semana?”; y “¿Qué humores, ritmos y actos te excitan durante el sexo?”, con algunos ejemplos.
