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En un mundo cada vez más acelerado y en constante cambio, muchas tradiciones van y vienen. Sin embargo, una de ellas se ha mantenido firme en el tiempo: el simple y delicado gesto de regalar una flor.
Se trata de una de las tradiciones más antiguas, trascendiendo regiones y culturas a lo largo de los siglos. Regalar una flor a otra persona es una manera de transmitir un mensaje, un sentimiento o emoción sin necesariamente utilizar las palabras.
Según Esteban Ibacache, dueño de la florería RosaLinda, una de las florerías con reparto de flores a domicilio más conocidas y con más historia de la región Metropolitana, esta tradición ha perdurado durante tanto tiempo debido a que “su belleza natural y fragancias pueden expresar amor, gratitud, felicidad, simpatía o incluso disculpas. Son un regalo que puede alegrar el día de alguien y que normalmente es recordado durante mucho tiempo”.
Y agregó que “a lo largo de la historia, han sido un medio de comunicación silencioso para expresar sentimientos que pueden ser difíciles de expresar con palabras. Además, su belleza natural nunca pasa de moda y siempre evoca emociones positivas”.
Consejo: muchas flores son de procedencia importada y esto encarece su precio, optar por flores de temporada y de cultivos nacionales suele ser una alternativa mucho más económica.
Cuándo es un buen momento para regalar un ramo de flores
Hay un sinfín de ocasiones especiales que pueden convertirse en una buena ocasión para regalar flores. El Día de la Mamá es uno de ellos por excelencia, así como fechas relevantes para cada persona como aniversarios o cumpleaños.
Para qué hablar de ocasiones como San Valentín, donde no pueden faltar las flores, especialmente las rosas rojas. O las clásicas flores para obsequiar en una graduación, un ascenso, un onomástico, el día de la secretaría o cualquier día donde se celebre alguna profesión específica.
Si bien existen fechas donde es común, e incluso esperable, recibir un ramo de flores, aquellos que se regalan de forma inesperada a veces pueden ser los más dulces y bien recibidos. Para Ibacache, siempre hay una buena razón para dar flores “sin ninguna razón evidente”.
Muchas veces, la elección de la flor dependerá de esa intención que se desea comunicar. Por ejemplo, las rosas rojas suelen utilizarse tradicionalmente para obsequiar a alguien con quien se mantiene una relación amorosa, mientras que un ramo de flores coloridas puede ser una excelente alternativa para regalar a una amistad en un momento importante de su vida.
¿Cómo saber qué flor regalar?
Como se mencionó anteriormente, hay cierto tipo de flores que se asocian en el inconsciente colectivo a determinados eventos o relaciones interpersonales. Por ejemplo, las clásicas rosas rojas para enamorados o flores blancas para velorios. Sin embargo, desde RosaLinda aseguran que esto es solo un lineamiento general, y que, a veces, salirse de las reglas puede ser aún más especial.
Por ejemplo, si deseas regalarle flores a alguien especial, llámese un novio/a, pareja o cónyuge, pero no quieres ir por el clásico arreglo de rosas, una alternativa puede ser un ramo de tulipanes de los más variados colores. En muchas culturas, esta flor es una referencia al amor sincero y regalarla simboliza enamoramiento, pasión y amor incondicional.
“Para aquellos con presupuesto limitado, recomendaría optar por flores de temporada, ya que suelen ser más asequibles. También se pueden elegir ramos más pequeños o incluso flores sueltas en lugar de arreglos florales elaborados”, aseguran desde la florería.
RosaLinda ofrece un producto asociado a este concepto, el cual está disponible en dos formatos: ramo y florero. Se llama “selección florista del día”.
¿Cuánto puede durar un ramo de flores?
La duración de los ramos o arreglos florales depende del tipo de flor, la forma en que se cuidan, y el clima. En general, las flores con tallos largos y gruesos con hojas verdes durarán más que las flores con tallos cortos, delgados y de hojas pequeñas.
Aquellas que se mantienen de buena forma en un lugar fresco y oscuro también durarán más que las flores que se exponen a la luz solar directa o se mantienen en un ambiente muy calefaccionado en invierno.
Las rosas pueden durar hasta 10 días si los cuidados son óptimos. Las gerberas y los liliums son otros tipos de flor populares que duran mucho tiempo y pueden durar hasta 7 días si se cuidan adecuadamente.
