Grace Roberts, una joven británica diagnosticada con una extraña enfermedad que la dejó paralizada de la cintura para abajo, logró convertirse en una estrella del básquetbol. Su inspiradora historia se hizo viral en redes sociales.
La adolescente de 17 años, padece el síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad poco común en la que el sistema inmunológico ataca los nervios periféricos, generando una parálisis del cuerpo.
Cabe señalar que esta enfermedad puede producirse por una infección bacteriana o viral aguda. Sus síntomas comienzan como debilidad y hormigueo en los pies y las piernas. Asimismo, puede extenderse a la parte superior del cuerpo, paralisándolo.
“Es una locura pensar que algo tan desconocido había impactado tanto mi vida. Cada vez que intentaba caminar, colapsaba, lo cual era frustrante como persona activa”, reconoció Roberts, en entrevista con el diario electrónico Metro UK.
Según reveló la joven, en las primeras semanas ni siquiera podía levantarse del sillón, sin sentirse insegura de su cuerpo. “Tenía que sujetarme a la pared para mantenerme estable”, añadió.
“Realmente no sabía que era el principio de la enfermedad y siempre decía que estaba bien porque no quería estar en el hospital”, admitió.
Fue internada
Tras perder la sensibilidad en sus piernas en 2016, su condición empeoró y debió ser internada en un hospital. En ese momento reconoció que fue muy difícil escuchar a los médicos decir que no podría volver a participar en deportes.
“El GBS es tan raro que el equipo de fisioterapeutas dijo que Grace era la tercera niña en Doncaster que se había tratado por ese diagnóstico. Nos quedamos muy sorprendidos”, admitió la madre de Grace.
La joven estaba paralizada de la cintura para abajo y sus brazos estaban muy débiles. “Sus músculos básicamente se estaban consumiendo (…) Fue muy doloroso para ella”, añadió.
Asimismo, se monitoreó constantemente a Grace para determinar sus niveles de oxígeno, ya que podría dejar de respirar en cualquier momento, una situación que sin duda era muy alarmante.
Su pasión por el básquetbol
A pesar de su enfermedad, Grace seguía motivada por su pasión por el deporte. “Iba intentar ir a los partidos de básquetbol para ver jugar a mis amigos”, señaló.
Sin embargo, después de cinco meses de rehabilitación en su silla de ruedas, la joven logró dar sus primeros pasos e incluso dejó atónitos a los médicos al ver que podía jugar con un balón.
Actualmente Grace juega para el equipo de Sheffield Hatters, un prestigioso club semiprofesional que participa en la histórica Liga Nacional de Baloncesto de Inglaterra.
“La rehabilitación se sintió más larga de lo que realmente fue; me tomó cinco meses levantarme de la silla de ruedas, lo cual fue bastante rápido, pero después tuve que usar muletas. Solo quiero compartir mi historia para ayudar a otros“, finalizó la joven.