“10 years challenge” es el nuevo desafío viral que se ha tomado la última semana y que consiste en compartir una foto actual comparándola con otra de hace 10 años.
Es así como las redes sociales se ha llenado de personas publicando sus fotos del pasado para mostrar su evolución.
Pero entre quienes se han sumado al desafío hubo un caso que conmovió a muchos. Nos referimos al de la presentadora británica Katie Price, una ex modelo que fue víctima de un ataque con ácido a manos de su ex pareja en 2008.
La brutal agresión destruyó el rostro de la mujer, quien desde entonces se ha sometido a más de 300 cirugías reconstructivas.
“Por un instante, no entendí qué había pasado. Entonces el dolor me golpeó: una explosión de agonía, distinta a cualquier cosa que había vivido antes. Se expandió a través de mi cuerpo como fuego. Podía sentir mi cara quemándose, tan caliente que pensé que iba a estallar en llamas”, dijo en una oportunidad al recordar el cobarde ataque.
Pero lejos de derrumbarse, Katie luchó por salir adelante y hoy tiene más ganas de vivir que nunca. “Decidí ser una sobreviviente”, contó Piper en una ocasión.
Por lo mismo, hoy su reto de los 10 años es distinto a los otros, pues entrega una inspiradora lección.
“No permitas que este desafío te genere ansiedad respecto a tu edad, es un privilegio absoluto. La primera foto cuando tenía 25 años en 2009 en la cocina de mi madre. ¡En la segunda foto tengo 35 años durante la semana pasada en mi propia cocina 2019!”, escribió junto a la imagen que revela lo bien que ha avanzado su recuperación.
Tras haber sido víctima del brutal ataque, creó la fundación “Katie Piper Foundation”, para ayudar a las víctimas de ataques con ácido. También escribió una autobiografía y condujo el programa “My Beautiful Face” del Canal 4 de Inglaterra, en el que ayudaba a personas que como ella atravesaban problemas por las condiciones adversas en su rostro o piel.
“Actualmente es muy fácil para alguien comprar una sustancia corrosiva y lanzarla, a veces a distancia, hacia otra persona. Es vital que evitemos este tipo de amenazas. Las leyes no reconocen lo severo que es este problema y las sentencias no reflejan la gravedad de los crímenes en muchos casos”, señaló en una oportunidad.
Actualmente, Katie Pipe está casada y tiene dos hijos.