En el fascinante mundo de la moda, ciertos vestidos se han convertido en verdaderas piezas de colección, alcanzando precios sorprendentes en subastas por su historia y su conexión con figuras icónicas como Lady Di y Marilyn Monroe.
Marilyn Monroe, quien murió en agosto de 1962, y Diana de Gales, en 1997, usaron varios atuendos que no solo eran elegantes, sino que también expresaban sus pensamientos y actitudes. Estos se han convertido en objetos muy valiosos y son algunos de los más caros que se han vendido.
Al igual que ellos, hay otros vestidos que también se han vendido por precios altísimos en subastas, captando la atención de muchas personas en todo el mundo. Aquí te mostramos cinco de estas piezas que han establecido récords por los altos precios a los que se han vendido.
El vestido de Kate Middleton, actual Princesa de Gales, usado cuando era estudiante en 2002 en un desfile benéfico y que se denominó como “el que robó el corazón del Principe William”, se vendió por 125 mil dólares, aproximadamente 115 millones de pesos chilenos, en una subasta de Lerry Taylor Auctions, una década después, según consignó Vanidades.
Conocido como “el vestido Travolta”, este icónico atuendo de la princesa Diana, que lució en 1985 durante un baile con el actor John Travolta en la Casa Blanca, alcanzó los 290 mil dólares, cerca de 267 millones de pesos chilenos, en una subasta de The Historical Royal Palaces.
El vestido negro de Givenchy que Audrey Hepburn usó en la cinta “Desayuno con Tifanny’s” en 2006 se vendió por unos 800 mil dólares, equivalente a 739 millones de pesos chilenos actuales, ocupando el tercer lugar de los vestidos más caros de la historia.
La Princesa Diana aparece por partida doble en el ranking, con su vestido de Jacques Azagury de color negro y azul.
El atuendo que vistió en un viaje a Italia y en Londres, durante un recital, fue vendido por 1.14 millones de dólares, unos 1.311 millones de pesos chilenos, en una subasta Hollywood Legends.
No obstante, el vestido más caro de la lista es el beige brillante de Marilyn Monroe, usado en 1962 para el cumpleaños de John F. Kennedy.
Este alcanzó un precio de 4.8 millones de dólares, aproximadamente 4.475 millones de pesos chilenos, en una subasta de Julien´s Auction.