La empresaria y figura televisiva estadounidense Kim Kardashian ha llevado la moda al límite desde que se convirtió en la nueva musa de la casa de alta moda española Balenciaga.
Cuando pensamos que nada podía superar a su traje negro que cubría por completo su piel, incluyendo su rostro, en la MET Gala, la socialité de 41 años sorprendió este fin de semana con un atuendo aún más extravagante.
Kim Kardashian asistió al show de Balenciaga en la Semana de la Moda de París, donde apareció enfundada con cinta de embalaje amarilla con el nombre de la marca. Además, acompañó el look con un bolso Hourglass de la misma casa de modas también cubierta por la huincha adhesiva.
Los inconvenientes del traje de Kim Kardashian
Pero la atrevida idea tuvo algunos inconvenientes. El primero de ellos es que la empresaria apenas se podía mover y sentarse era todo un suplicio.
Por otro lado, la crítica de moda del New York Times, Vanessa Friedman, contó que estuvo sentada muy cerca de Kardashianen el evento y notó que su traje hacia un ruido muy molesto -el típico de roce de cinta adhesiva- cada vez que se movía, consigna Vogue.
Además, cuando la influencer se sentó, debió hacerlo con mucho cuidado para no se rompiera. “Tengo miedo de que se rompa cuando me siente. ¿Debería simplemente dejar que se rompa?”, habría señalado Kardashian según Friedman.
Kardashian mostró parte del proceso del traje de cinta adhesiva en sus redes sociales.
Recordemos que esta aparición pública de la fundadora de SKIMS, ocurre a pocos días de que un tribunal la declarara oficialmente “soltera”. Esto luego de un difícil proceso de divorcio de su exesposo Kanye West, quien no quería separarse de ella.
Tras hacerse pública la determinación del juez, Kim Kardashian borró el apellido “West”, en sus cuentas de redes sociales.