Cada cierto tiempo la colorida tendencia de los estampados ‘tie-dye’ (teñido anudado) resurge en el mundo de la moda, con diferentes propuestas.
Según destaca la revista Vogue, Prada presentó una colección inspirada en estos diseños en 2004, mientras que Proenza Schouler lo hizo en 2011.
Algo similar ocurrió en durante 2018, cuando la industria de la moda aseguraba que la tendencia de los colores desteñidos se convertirían en el estampado favorito del 2019.
Lo cierto es que históricamente las prendas tie-dye surgieron en los años 60, impulsados por el “look hippie” del poder de las flores. Todo inició con la ropa desteñida con lejía donde resultaban improvisados diseños.
Cabe destacar en la década de los 60- 70, esta tendencia era un fenómeno generalizado que se convirtió en un símbolo de individualidad y expresión creativa, a través de versiones hechas a mano y de bajo costo.
“Desde las combinaciones de colores más sofisticadas hasta las telas más elevadas y las formas inesperadas, el nuevo tie-dye es más elevado y vanguardista“, explica la directora de Net-A-Porter Elizabeth von der Goltz, a la revista digital Harpers Bazaar.
“Los lavados ácidos y los tonos brillantes han transformado el tie-dye desde sus raíces hippies”, complementa el gerente de compras de ropa femenina de Selfridges, Luke Mountain. Asimismo, agrega que los diseñadores han apostado más allá de simples camisetas.
En este contexto, destaca que se pueden encontrar desde chaquetas acolchadas del Shoreditch Ski Club, hasta faldas y vestidos adornados en Prada.
“Es tan relevante para la época actual como lo fue en el movimiento de los hippies”, destaca la diseñadora A Sai Ta.
Desde su perspectiva, los diseños tie-dye son un reflejo de la libertad y la esperanza. “El proceso de teñido anudado siempre crea resultados inesperados e inciertos, que supongo que es el estado de ánimo de los tiempos actuales. Lo desconocido está más presente“, reflexiona.
No hay dos diseños iguales
Tradicionalmente el tie-dye se realiza anudando la prenda con un elástico, por lo que la tinta solo cubre las áreas expuestas. Eso significa que no existen dos resultados iguales.
“Esta forma de diseñar y vestir permitió una individualidad completa que a veces puede faltar en la moda en estos días“, dijo Kavita Kumari, técnica especializada en estampados y tintes en el London College of Fashion.
“El renacimiento del tie-dye en realidad ha brindado a las personas la oportunidad de reclamar parte de su identidad personal sin parecer clones entre sí. El consumismo ha cambiado significativamente y, aunque el mercado de la moda ya está saturado, parece que la variedad sigue siendo bastante limitada”, enfatiza.
Asociado a la sustentabilidad
Por otra parte, los expertos en el tema destacan que el renacer del tie-dye es una clara señal de que la industria de la moda está cambiando hacia la sustentabilidad.
Asimismo, cada vez son más las líneas que han descartado las pieles de sus colecciones (Chanel, Versace, Jean Paul Gaultier, entre otros) y una gran cantidad de marcas emergentes han puesto la ética en la vanguardia, eliminando la cuestionada “moda desechable”.
“La conciencia actual en torno a palabras como ‘moda rápida’ y sostenibilidad, es probablemente la responsable de la regeneración del tie-dye en la actualidad”, asegura Kumari.
“Su prevalencia se deriva de los cambios en la moda como industria. La asociación de sostenibilidad, moda ecológica y tintes naturales, son grandes influenciadores de su resurgimiento“, concluye.