El 3 de noviembre de 1914, la estadounidense Mary Phelps Jacob, patentó una prenda que mejoró la vida de muchas mujeres y que transformó la moda de la ropa interior de la época. Desde ese momento han sido innumerables los cambios que el sostén ha tenido.

Aún cuando esta semana cumplirá 104 años, existen muchas dudas respecto a su uso y sobre cómo elegirlo correctamente para que otorgue el confort y tan añorado calce perfecto.

Alejandra Espinoza, subgerente de marketing de Flores indicó que “según estudios, el 80% de las mujeres en Chile desconoce cuál es su talla de sostén”. “Una cifra muy preocupante, que expone a las mujeres a sufrir de diversas incomodidades y, más aún, problemas de salud”, agregó.

Es por eso que, en conjunto con la diseñadora María Urra, respondieron algunas de las preguntas más habituales que surgen en torno a esta emblemática prenda:

1. ¿Cómo elegir la talla perfecta?

Es importante saber elegir la talla correcta de sostén: el contorno de la persona corresponde al número (que suele ir de la 32 a la 44) y el tamaño del busto se refiere a la copa (A, B, C, D, DD).

“La copa del sostén debe sostener el busto completo. Si la parte trasera se sube en la espalda, hay que cambiarlo de inmediato, ya que indica que es grande de contorno y no es la talla correcta; el sostén debe estar a la misma altura por delante y atrás”, comenta Espinoza.

El Comercio
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2. ¿Cuál es la edad idónea para usar el primer sostén?

Si bien no existe una edad concreta para comenzar a usar sostén, existen algunos signos que se observan durante el período del desarrollo que pueden indicar tanto a los padres como a las chicas, que ya están listas para elegir su primer sostén. Por lo general, suele ser entre los 12-14 años de edad.

Espinoza comentó que este tipo de sostenes deben ser de algodón, con pocas costuras, sin arcos, de tela suave, ya que permiten que la adolescente se vaya acostumbrando a utilizar esta nueva prenda. “La elección de la talla es sumamente importante; si bien en esta etapa no cumple la función de soporte, debe ser una prenda delicada que no genere incomodidades”, agregó.

3. ¿Es recomendable dormir con sostén?

Esta es quizá una de las dudas que ha existido por más tiempo respecto al sostén. Por un lado, algunos relacionan el dormir con sostén con enfermedades como el cáncer de mama; mientras que otros aseguran que genera flacidez. Ninguna de las dos respuestas ha sido confirmada científicamente.

Sin embargo, dormir sin sostén puede generar un descanso favorable en el cuerpo y sensación de bienestar. María Urra agregó que: “Si eres de las que se siente incómoda durmiendo sin sostén, la recomendación es preferir los modelos sin costura y sin arco como los bralette, o los deportivos de bajo impacto, que te harán sentir el soporte desea, al mismo tiempo que el descanso que necesitas al dormir”.

4. ¿Cuántos días seguidos se puede usar el mismo sostén, cada cuánto debe lavarse y cómo?

El sostén se debe usar máximo dos días seguidos. En cuanto al lavado, María Urra indicó que se deben seguir las especificaciones de la etiqueta.

Sin embargo, se recomienda que “para mantener la prenda en mejor estado, lo mejor es lavar a mano, con agua tibia y con el detergente bien diluido para evitar manchas”.

“Si se lava a máquina, colocar la prenda dentro de las bolsas de lavado y seleccionar el ciclo delicado de la lavadora. Para mantener la forma del sostén, al sacar de la lavadora y antes de secarlo, es necesario ubicar los tirantes derechos y colocar de manera correcta la copa, esto ayudará a que mantenga su estado original. Secar siempre a la sombra y no usar secadora”, agregó.

5. ¿Qué uso o acción es lo que más daña un sostén?

Lo que más daña la ropa interior es el uso excesivo de una única prenda, el lavado equivocado y el mal guardado.

En primer lugar, para evitar los daños de los sostenes es importante contar con varios para aumentar la rotación y disminuir la frecuencia del lavado, el cual se debe realizar después de dos días de uso y preferiblemente no todas las semanas para evitar que se debilite la prenda.

Siempre es preferible lavar el sostén a mano; sin embargo, para quienes lo hacen en lavadora automática, se recomienda que sea dentro de una bolsa de malla especialmente creada para este propósito y de este modo evitar que las varillas se doblen o enganchen con otra ropa.

Espinoza recalcó que: “Al guardarlo se debe colocar en una cajonera uno detrás de otro, o uno sobre otro, para evitar el doblez de la copa. De igual forma, al guardarlo dentro de una maleta, por ejemplo, es preferible colocar calcetines o calzones dentro de la copa para evitar su deformación”.