La violencia en el pololeo volvió a la palestra pública, luego que el futbolista de Colo-Colo, Jordhy Thompson, fuera detenido por un hecho de violencia intrafamiliar hacia su entonces pareja, Camila Sepúlveda.

“Ella señaló que hubo una discusión por celos. Tras ello, hubo golpes e incluso un intento de asfixia”, reveló el parte policial.“Fue algo muy fuerte, que nunca pensé que me iba a pasar, en donde casi me mató”, relató Sepúlveda.

Justo después, ella advirtió que el deportista tiene problemas con el consumo de alcohol y que había una dinámica de manipulación. “Peleábamos, me agredía y después lloraba, me pedía perdón diciendo que iba a cambiar”, contó.

La violencia intrafamiliar puede escalar a casos aún más graves. En el país, durante este año, van registrados 36 femicidios y 186 femicidios frustrados, según cifras del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.

Al respecto, hay varios factores que inciden en el comportamiento de una víctima, explican los expertos, ya que usualmente hay críticas a quien denuncia, además, de que supuestamente no actúan a tiempo, ante las conductas abusivas de la pareja.

Claves para identificar la violencia de género

Cuando hay maltrato físico y psicológico hay muchos factores complejos involucrados. Por ejemplo: cuando hay un patrón cíclico que incluye episodios de abuso y de violencia. Bajo este contexto, hay disculpas y promesas de cambio. Entonces la víctima se aferra a estas promesas, con la esperanza que la relación puede cambiar, así lo confirma la Doctora en Psicología Yuvitza Reyes a BBCL.

La académica de la Universidad Andrés Bello expresa que “este patrón cíclico es invisible para la víctima. Otro factor es que haya dependencia emocional de parte de la víctima hacia el agresor”.

La docente aclara que esto puede ser causado por miedo a la soledad y baja autoestima. “Un tercer factor involucrado es el aislamiento social, ya que los agresores aíslan a las víctimas de sus amigos y familiares, a fin de que ella no pueda generar una relación de apoyo. Por tanto, las mujeres se sienten solas, sin recursos, para buscar ayuda”, sostiene.

“Entre otros factores que inciden en la violencia, es la falta de recursos financieros. Usualmente, cuando las mujeres dependen económicamente de su agresor, es muy difícil para ellas poder dejar esta relación”, enumera la académica.

“Además, un punto central es relativo a la culpa y la vergüenza, ya que las mujeres que son manipuladas, sienten que es su culpa y que merecen ser golpeadas, lo cual sienten mucha vergüenza”, agrega Reyes.

“Tanto la vergüenza como la culpa pueden ser barreras para buscar ayuda”, explica la especialista en temas de género.

Cuáles son las señales para estar alerta durante el pololeo

Cuando el agresor minimiza y niega el maltrato frente a la víctima, expresa Yuvitza Reyes, es la principal señal para considerar que se vive una relación abusiva en el pololeo.

“Las señales de violencia psicológica son sutiles, siendo una práctica que puede ser vista como una constante crítica hacia la pareja donde se ridiculiza y menosprecia”, detalla la especialista.

Otra señal es el control, cuando la pareja trata de controlar todos los aspectos de la vida, como las amistades, la forma de vestir y realizar acusaciones infundadas de infidelidad, afirma a nuestro sitio.

“Un mecanismo de violencia psicológica es la humillación pública y privada que despoja la dignidad de la persona, siendo la exigencia de perfección un estándar inalcanzable”, aclara la académica.

De igual forma, Javiera Rebolledo, psicóloga de la Universidad de Concepción, revela que la existencia de jerarquías de poder en la relación es clave para entender los abusos.

“Las jerarquías de poder se entienden como estas relaciones en las que hay una persona que tiene mayor autoridad; mayor control sobre la otra, lo que se refleja en la toma de decisiones y la resolución de conflictos”, indica Rebolledo.

“Esto tiene que ver con temas culturales, en específico con los roles de género ‘tradicionales’ en los que, por ejemplo, el hombre es el líder de la familia.

Por el contrario, la mujer está sometida al rol de labores domésticas, de atención, de crianza, cuidado, etcétera. Esto es cultural, existe y lamentablemente se reproduce”, expresa la psicóloga.

Consejos para acompañar a una víctima de violencia en el pololeo

Lo importante también es no juzgar en el caso de que la mujer no quisiera recibir ayuda psicológica, porque al sufrir violencia física y psicológica, lo está pasando tan mal, que lo más interesante es poder acoger a la persona, ser comprensiva en la escucha sin interrumpir y sin imponer opiniones.

“Hay que tratar de validar sus emociones y considerar que cada persona tiene sus propios tiempos”, acota Reyes.

Finalmente, la experta indica que la familia y las redes de apoyo son esenciales para salir adelante. Por lo mismo, los integrantes de una comunidad “cumplen un rol importante cuando está sufriendo la violencia y lo segundo, para salir del ciclo, es relevante contar con empatía”, expresa.

Asimismo, es esencial validar los sentimientos y brindar información de las líneas de ayuda, para contar con el monitoreo de una especialista en violencia de género.

También es importante evitar el contacto con el abusador, sostiene la profesional.