Una joven que vive en Alemania aseguró que podría ser Madeleine McCan, la menor de tres años que desapareció en 2007 mientras vacacionaba con sus padres en Portugal.
Fue a través de una cuenta de Instagram (@iammadeleinemccan) que la joven empezó a subir fotografías, demostrando ciertas similitudes físicas entre ella y Madeleine. Dos lunares en sus piernas y una mancha al costado de su ojo izquierdo, figuran como “evidencia”.
“No recuerdo mucho de mi infancia, pero mi primer recuerdo es muy fuerte. Es sobre unas vacaciones en un lugar muy caluroso. Había una playa y edificios con departamentos blancos o de colores muy claros”, relata Julia Faustyna -identidad de acuerdo a Perfil Brasil– en una de las publicaciones.
A través del perfil, la mujer asegura que la policía la ha ignorado. “Necesito que la policía me haga una prueba de ADN y la compare con el de Madeleine. Necesito hablar con Kate y Gerry Mccann (los padres de la pequeña)”, solicita en más de una publicación.
Amnesia post traumática
Según sus documentos, tiene 21 años y asegura que no recuerda su infancia por tener amnesia post traumática. “Fui víctima de un pedófilo alemán”, declara. Sería “un familiar” y su apellido “Ney”. Esto último le causó curiosidad. “Por una extraña coincidencia, uno de los sospechosos en la desaparición de Madeleine McCann es Martin Ney”, argumenta.
“Soy real, estoy muy estresada, pero gracias por su ayuda y su apoyo. Espero que alguien me hable y me ayude, incluso si no soy Madeleine, creo que la policía debería averiguar esto, no puedo estar 100% segura sin una prueba de ADN”, declaró en un video.
Las primeras publicaciones son del pasado miércoles 15 de febrero. Con 38 post, la cuenta suma 237 mil seguidores.
Caso Madeleine McCan
El caso Madeleine McCann comenzó el 3 de mayo del 2007, cuando la pequeña de tres años desapareció mientras vacacionaba con su familia, de origen inglés, en Praia da Luz, en Portugal. Su rastro se perdió cuando dormía en una habitación del hotel con sus dos hermanos, mientras sus padres cenaban con amigos en un restaurante cercano.
Al principal sospechoso del caso, Christian Brueckner, se le imputaron cinco delitos sexuales en 2022. La hipótesis principal es que el hombre mató a Madeleine tras secuestrarla.