El fotógrafo chileno Francisco Negroni ha sido premiado en la categoría “Belleza Natural” del premio italiano Siena International Photo Awards 2018, gracias a una impresionante imagen que captó durante la erupción del volcán Calbuco en abril de 2015.
Tal como recoge el periódico nacional LUN, se trata del sexto premio internacional que logra Negroni, quien ha inmortalizado en imágenes diversas erupciones.
Para alzarse como el ganador de su categoría, el chileno se impuso ante Khalid Alsabt, de Arabia Saudita, y Mariusz Potocki, de Polonia.
El fotógrafo precisó al citado medio que no pudo viajar a Italia a recibir el premio, debido a que tenía un safari fotográfico en las Torres del Paine.
A continuación te dejamos con la imagen ganadora.
Contrario a lo que muchos podrían pensar, el experto aseveró que no es necesario estar tan cerca de una erupción para lograr buenas imágenes.
En el caso de su fotografía, llamada El Calbuco, el chileno utilizó una cámara Nikon d600 de 24 megapixeles, un lente 80-200 Nikon 2.8, un trípode y un disparador.
Al momento de la captura, a las 4:00 de la madrugada del 23 de abril de 2015, Negroni se encontraba a unos 70 km en línea recta del macizo, en la cordillera de la costa de la comuna de Fresia.
“Cazador” de volcanes
El Calbuco no es el único volcán captado por el lente de Negroni. Pocos días después de la erupción del Volcán Villarrica en marzo de 2015, BioBioChile conversó con Francisco Negroni, reconocido por su trabajo en fotografía de naturaleza. En ese entonces sus impactantes imágenes recorrieron el mundo.
Su llegada a Pucón no fue casualidad. Esa erupción fue la quinta que cruzó su lente, y en aquella oportunidad afirmó que ya estaba acostumbrado a buscar incansablemente en las redes sociales o en las cámaras del Sernageomin algún indicio que lo impulsara a tomar su vehículo y dirigirse al macizo que más concitara la atención.
“Yo no podía saber si la erupción (del volcán Villarrica) iba a pasar, simplemente me ubiqué en unos buenos lugares que yo ya había visto en otros viajes”, comentó.
“Estuve yendo desde que empezó la actividad, todas las semanas hice un viaje para ver qué era lo que estaba pasando, buscar lugares donde instalarme para fotografiar si es que realmente había una erupción”, agregó.
Además del Calbuco y Villarrica, Negroni ha sido testigo de otras erupciones: la primera fue el volcán Llaima en 2008, la segunda fue el Chaitén ese mismo año, seguida por el Cordón Caulle en 2011 y el Copahue entre 2012 y 2013.