Cada día son más los chilenos que toman sus maletas y emprenden la aventura de migrar al extranjero. Algunos lo hacen sólo por conocer la cultura y tener la oportunidad de estar en otro país. Sin embargo, sumarle a eso la posibilidad de estudiar becado le da otro plus al viaje.
Si te interesa perfeccionar tu carrera fuera del territorio nacional, busca lápiz y papel, pues éste puede ser el momento de hacerlo.
Si fuiste a la universidad y estás titulado de una carrera de al menos 8 semestres, tenemos buenas noticias para ti: existen diversas becas (públicas y privadas) que te permitirían ir al extranjero a mejorar tu currículum profesional para estudiar un postgrado en una de las mejores universidades del mundo.
Guillermo Barros es fundador de Nexstep Chile, empresa que se dedica a guiar a los profesionales en la postulación a las becas de postítulo en el extranjero. Según explica, lo primero que debe hacer un interesado es elegir el programa de estudio que desea concursar.
Para ello, existen dos portales que poseen la información condensada: www.postgrade.com y www. masterstudies.com. “Entonces, más que meterse a Google, conviene buscar en estos sitios que te preguntan por palabras claves y filtro de acuerdo a dónde se quiera ir”, aclaró.
Sin embargo, no todo es elegir qué estudiar. Para tener opciones reales de ganarse una beca hay que sopesar si la universidad a la que deseo ir es reconocida como una de las cien mejores del mundo, para lo cual existen distintos rankings.
“Uno de ellos es el QS, valorado a nivel internacional al igual que el THE. Además, en Chile Conicyt también aporta uno que está dividido por áreas de estudio que es bastante completo”, explica el profesional.
Becas Chile
A juicio de Barros, las Becas Chile son las mejores becas a las que podemos optar, ya que tienen mucha cobertura y “altas probabilidades de ganar”.
Hay cuatro requisitos básicos para postular, el primero es ser chileno o tener residencia definitiva en Chile. Además, se debe poseer un título profesional o un grado académico de licenciado de al menos 8 semestres formativos. El tercer requisito es estar aceptado en un programa universitario extranjero y finalmente haber terminado la carrera de pre grado con al menos un promedio de 5.0 o superior.
Barros hace un reparo en ese último punto, pues señala que “si bien con esa nota se pueden inscribir, la verdad es que el 95% de la gente que gana la beca tiene un promedio sobre 5.5 y el 50% del total de los beneficiados están sobre el 6.0”, explica. Además, resalta que es importante el ranking de egreso, pues “desde este año se debe estar en el 30% superior. El puntaje otorgado es una combinación de ambas cosas”, señala.
En caso de obtenerla, ésta financia los pasajes desde la ciudad de residencia hasta la del destino. Además, paga el 100% de lo que cobra la universidad por el programa.
A eso se suma una asignación de 500 dólares (unos 320 mil pesos chilenos) para instalarse en el nuevo país y una manutención que se la dan al becario, cónyuge e hijos durante todo el tiempo académico. El monto dependerá del país al cual vayan. Junto con ello, se asignan 300 dólares anuales para materiales (193 mil aproximadamente), seguro médico y asignación de regreso a Chile de otros 500 dólares.
Becas Fulbright
Desde 1955 que existe un acuerdo entre los gobiernos de Chile y Estados Unidos para crear una comisión que propicie el intercambio educacional entre ambos países. ¿Su propósito? Establecer programas dirigidos a potenciar el entendimiento mutuo entre las naciones a través del conocimiento adquirido en ámbitos científicos, técnicos y profesionales en ambos lados.
Fue así como en 1997 se crea una comisión bilateral que se denomina Fulbright. Se trata de un organismo binacional reconocido por ambos países y creado para facilitar la administración de programas de intercambio educativo financiado con fondos dispuestos por ambos gobiernos.
Esta comisión ofrece diferentes becas de intercambio para los chilenos y los beneficios varían en cada una de ellas. En general, los requisitos exigidos por Fulbright para postular a un programa son: poseer nacionalidad chilena, tener una carrera profesional o el grado de licenciado de una que dure 8 semestres. Además se debe acreditar el dominio del idioma inglés a través del Toefl, Ielts o Etaap.
En el caso de un magíster, los requisitos académicos para postular tienen tres escenarios diferentes: el primero, tener sobre 5.0 y estar en el 30% superior del ranking de egreso, el segundo, estar sobre el 5.5 independiente del ranking o el último estar sobre el 30% independiente de la nota promedio al terminar su formación universitaria.
Además se valora la experiencia laboral e investigativo en el ámbito que se desea estudiar, si se tiene espíritu de liderazgo y menos de 35 años también son puntos extras. Quienes cumplan con todos los requerimientos deberán postular en línea, para luego pasar por un panel de selección con miembros del directorio, ex becarios, profesores de EEUU y Fulbrigthers en Chile.
Posterior a ello, habrá una ratificación y adjudicación de la beca para finalmente postular a su financiamiento.
Becas ofrecidas directamente por universidades extranjeras
Distintas casas de estudio extranjeras también cuentan con becas propias en las que invitan a los chilenos a formarse con ellas. Sin embargo, cada una tiene diferentes requisitos.
“Las top te piden un promedio sobre el 6.0 y te hacen pruebas externas para tu ingreso. Si te vas a universidades con un ranking más bajo la selección también será menor”, asegura Guillermo Barros. “Así que ojo con los ofertones”, advierte.
La experiencia
Raphael Cantillana es antropólogo y uno de los beneficiarios de estos programas. Señala que el proceso de postulación fue complejo, pero que vale la pena aprovechar este tipo de oportunidades, ya que si bien se echa de menos la tierra y la familia, también se crece como persona.
Opinión similar tiene Maricarmen Guerra, chilena que reside en Seattle y que asiste a la Universidad de Washington para estudiar un doctorado en Ingeniería Civil Ambiental.
A su juicio, lo más largo es la postulación a la casa de estudios superiores. Una vez allá, el cambio cultural puede ser fuerte, pero se supera y cuando se hacen amigos “son de verdad”, asegura la becaria. Considera que ha tenido suerte, pues gusta de su ciudad, ha formado un grupo de gente cercana y mucho apoyo emocional, afirma.
Sin embargo, Raphael hace una crítica al proceso de postulación, pues cree que éste es muy lento, ya que muchas veces las respuestas demoran demasiado tiempo y eso genera estrés. Por ello, es enfático en recalcar que “si bien la beca es muy buena, se tiene una deuda respecto de la capacidad de gestión”.
Consejos:
1. Llevar un ahorro a este viaje. Ojalá una base de 200 ó 300 mil pesos para sumarlo al piso que entregan las becas mes a mes.
2. Buscar un programa en la misma línea profesional que uno lleva. “La gente vuelve con pega siempre que vaya a estudiar algo que sepa y conozco. Si he trabajado en algo específico y conozco ese tem,a me voy a seguir desarrollando en esa área. De lo contrario, a la vuelta se ve enfrentado a un campo laboral que desconoce y es como partir de cero. Esto es para perfeccionarme, no para descubrir un nuevo rumbo”, sostiene Barros.
3. Postular en paralelo a más de una universidad.
El paso a paso de un experto:
1. Pueden guiarse por asesorías o buscar por su cuenta el programa que les guste y que se adapte a su perfil.
2. Buscar los requisitos que me pedirán para ingresar a ese magíster o doctorado, como la certificación del inglés (hay que fijarse en el puntaje exigido por la universidad).
3. Si se cumple con los requisitos, se debe postular. Ello se traduce en demostrar el nivel de inglés requerido, enviar toda la documentación que me solicita mi “futura universidad” traducidos oficialmente por el Ministerio de Relaciones Exteriores y enviar dos cartas, una de motivación y recomendación.
Lo aconsejable, es que sea de personas con el mismo grado académico al que postulo (doctorado o magíster). Además, es recomendable ser transparente y decir en las entrevistas que la realización del postgrado está sujeto a ganarse la beca.
4. Una vez que la universidad te acepte, postular a la beca con todos los pasos que ello implica.