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La joven artista penquista Sofía Lagos Rivera ha revolucionado las redes sociales con sus pinturas que retratan situaciones cotidianas de su entorno en Concepción y Chillán. Egresada de la Universidad de Concepción, siempre tuvo interés por lo creativo, lo que la llevó a estudiar arte. Su inspiración surgió desde el colegio y ahora, con 24 años, se destaca por su enfoque en la pintura reflexiva, explorando temas de memoria, feminismos y territorio. Sofía ha logrado una buena recepción del público, con historias conmovedoras detrás de sus obras, como la conexión de una mujer con una pintura tras la pérdida de su marido pintor.
Sofía Lagos Rivera, una joven artista penquista, revolucionó las redes sociales con la creación de sus pinturas sobre situaciones cotidianas de su entorno, las cuales ya ha logrado exhibir en Concepción y Chillán.
La artista visual de 24 años, egresada de la Universidad de Concepción, confiesa a BioBioChile que siempre le interesó lo creativo y que estudiar arte fue “como una necesidad”.
En un inicio creyó que su rumbo iba ligado a las leyes, por lo que decidió estudiar derecho. Pronto se dio cuenta que el arte ya era parte de ella, y optó por estudiarlo.
Sofía Lagos Rivera, la joven artista penquista
Sofía cuenta que su inspiración inició desde el colegio. En un inicio fue motivada por su profesor de básica a quien vio desarrollar su talento sin inconvenientes y lograr “vivir del arte”, al contrario de lo que muchas personas opinaban.
“Francisco Brune, fue mi profesor en la básica, es un artista visual, pintor. Yo vi que a él le iba bien, que iba a hacer residencias, que trabajaba en Portugal, ‘no se estaba muriendo de hambre’, como me habían dicho”, sostuvo.
“Así que yo dije, ‘Si él puede, ¿por qué yo no?"”, agregó.
Con este impulso comenzó a trabajar y a mostrar su arte desde adolescente, e incluso antes de terminar su carrera. “Creo que eso también ha ayudado bastante a la visibilidad que ha tenido mi trabajo”, menciona.
En ese tiempo la artista penquista mostraba sus creaciones “muy intuitivamente… Subía ilustraciones que sí tenían un trasfondo, trataba de que tuvieran cierto concepto”, sostiene.
Así, mientras perfeccionaba su estilo con sus clases en la universidad, empezó a interesarle la pintura y decidió indagar más en ella.
Inició con obras en pintura y no se detuvo más
“Ahí comenzaron a nacer estas pinturas de Concepción, de personas que me llamaban la atención. Entonces fue un trabajo muy intuitivo”, cuenta.
Su práctica se centra en la pintura reflexiva, “con el objetivo de crear un campo reflexivo que se expanda y genere cruces entre memoria, feminismos y territorio”, detalla en sus redes sociales, donde se muestran sus obras terminadas y algunas en proceso.
La joven artista busca retratar las experiencias y problemáticas que les afectan y abordar temas de marginalidad, memoria y contexto desde una perspectiva local desde la pintura.
“Yo no salgo a la calle buscando esas cosas (situaciones específicas). Yo las voy encontrando en mi rutina diaria, cuando voy al trabajo, por ejemplo”, explica a BioBioChile.
“Las personas siempre me han llamado la atención: las cosas que hacen, cómo se desenvuelven en el espacio público y cómo lo apropian también. Yo creo que esos espacios vienen a formar parte de nuestra identidad de cierto modo. Entonces, me gusta ver esas distintas maneras en que las personas hacen uso de sus espacios“, cuenta.
Tras encontrar la imagen perfecta que encaja con la finalidad de su arte, inicia el proceso creativo, de la mano de la técnica en acrílico. “Voy comenzando con capas muy aguadas de pintura, y encima, a medida que voy avanzando, se le va quitando el agua a la pintura y trabajo con más fuerza”, explica.
A esto último complementa que “el resultado es una pintura en la cual se va leyendo todo el proceso de la misma pintura, como uno puede ver las primeras capas hasta la última. Uno ve el boceto, la cuadrícula que usa, entonces eso también es como una metáfora o un modo de hacerlo simbólico para entender la pintura como un acto de memoria, como de historia, de construir la historia“.
De todas aquellas creaciones, Sofía cuenta que no solo ha logrado una muy buena recepción del público, sino que también conoció, sin querer, bellas historias detrás de algunas personas que retrató.
Historias detrás de sus obras
La obra: “Usted va en la micro” de la serie “Usted no me vio”, causó todo tipo de reacciones en redes sociales, como también en la protagonista.
Luego que cercanas a la mujer encontraran la obra en redes, se contactaron con Sofía y lograron que ambas se comunicaran.
“Me envió un correo muy lindo explicándome que ese día iba con muchas emociones muy densas y que fue como una sorpresa verse en una pintura… fue una situación muy bella del reconocerse“, detalla.
Sofía cuenta que otra mujer conectó con otra de sus obras en otro aspecto, desde un lado mucho más profundo. “Su marido que falleció en 2019 también pintaba y tenía la casa llena de los retratos y pinturas de él. Entonces verse en esa pintura para ella fue como una señal de parte de él de que la estaba cuidando“, recuerda.
Otra de las situaciones ocurrió en Santiago, cuando una mujer se emocionó hasta las lágrimas por la obra “Casa Ajena” una historia que Sofía desarrolló en la pintura.
“Es como la vida misma plasmada en una obra. Es un relato muy íntimo que trata acerca de la violencia de género y como una mujer que sufre violencia se va quitando ese papel de víctima y se va abriendo”, sostiene.
Las obras de Sofía producen situaciones como estas últimas y muchas otras que llegan a su celular constantemente. Pinturas con sentido, llenas de emociones.
Actualmente, la joven artista imparte clases de dibujo, trabajando con niños de enseñanza básica y media. Además, se encuentra realizando exposición de sus obras en Concepción y Chillán, revelando que no descarta futuras muestras en otras ciudades del país en lo que queda de este año y en los próximos.